No críes niños flojos, tu hijo puede ayudar en casa desde pequeño
Cada tarea asignada lo ayudará a adquirir nuevas capacidades de aprendizaje que aplicará en el futuro.
DESARROLLA SU MOTRICIDAD FINA CON MOVIMIENTOS DE MÚSCULOS Y MANOS
Tender la cama u ordenar los juguetes mejorará la coordinación ojo-mano y el movimiento de agarre y sujeción de objetos.
ESTIMULA SU CAPACIDAD DE COLABORACIÓN
Al hacerlo partícipe en los quehaceres, siente que forma parte de un equipo.
CREA HÁBITOS Y RUTINAS
Éstos desarrollan su pensamiento y lo hacen crecer con seguridad.
SE VUELVE MÁS ORGANIZADO
Al resolver las tareas, aprenderá a organizar mejor su tiempo.
UNE A LA FAMILIA
Cuando colabora en casa, aprende que es un miembro valioso en la familia.
LO AYUDA A SU MADUREZ PERSONAL E INTELECTUAL
Los niños que ayudan en casa normalmente tienen mejores calificaciones, pues esto los hace más disciplinados y fortalece su carácter.
LE ENSEÑA A COLABORAR CON LOS DEMÁS
Aprenderá a anteponer las necesidades de sus hermanos o de otras personas.
MEJORA SU AUTOESTIMA
El hecho de confiarle una responsabilidad le genera satisfacción y lo hace una persona más segura.
Si no sabes qué tareas asignarles según su edad, esta lista te ayudará:
De 2 a 3 años:
• Recoger los juguetes.
• Poner la ropa sucia en su lugar.
• Ayudar a limpiar los derrames.
• Llevar la basura a su lugar correspondiente.
• Limpiar el polvo.
• Regar las plantas con una regadera.
De 4 a 6 años:
Hacer la cama con la ayuda de un adulto.
• Dar de comer a las mascotas.
• Poner, recoger y limpiar la mesa.
• Barrer con una escoba, acorde a su edad y altura.
• Ayudar a preparar comidas sencillas.
• Guardar los libros.
• Seleccionar la ropa.
De 7 a 9 años:
• Es capaz de levantarse por la mañana con una alarma.
• Hacer la cama. • Cuidar de las mascotas, como perros y gatos.
• Doblar y guardar la ropa.
• Limpiar los espejos o cualquier superficie de la casa.
• Barrer con mayor eficacia.
• Preparar comidas con ayuda de un adulto.
Más de 10 años:
Limpiar y organizar su habitación.
• Lavar los platos.
• Preparar una comida sin ayuda.
• Cuidar del jardín.
• Poner la lavadora o secadora.
• Tender la ropa.
• Planchar.
• Sacar la basura.
• Enseñar a otro hermano a hacer las tareas.
No lo hagas sentir que es un castigo, así que cuida la forma en cómo se lo pides
1. Enséñale cómo se hace, con paciencia, y supervísalo.
Explícale con tranquilidad, paso a paso, lo que tiene que hacer y cómo, y dile que no se sienta frustrado si no le sale a la primera.
2. No lo regañes si le sale mal o ya no querrá intentarlo.
Recuerda que tu pequeño ha dado lo mejor de sí, y si lo criticas o le gritas, sólo lo harás sentir mal y se dañará su seguridad en sí mismo. Aunque se desespere, no hagas las tareas por él, así lo enseñarás a ser perseverante.
3. No hagas que vea las tareas del hogar como algo tedioso o aburrido.
Recuerda que siempre debes darle las gracias; felicítalo y hazlo sentir que su ayuda es muy valiosa.