La historia detrás del ‘saqueadorcito’ de tienda en Quintana Roo
No es un perro callejero como todos pensaban.
La historia del “saqueadorcito” de Chetumal.
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La semana pasada en todo el país hubo protestas y saqueos por el aumento a la gasolina, pero en Chetumal hubo un caso muy especial que se viralizó de inmediato.
Se trata del “saqueadorcito” un perrito que aprovechó la alocada situación que se vivía en una tienda Dunosusa de Chetumal, Yucatán, para tomar una bolsa de frituras y escapar.
Alguien lo vio con su botín en el hocico y le tomó una foto, la cuál ha sacado cientos de sonrisas y hasta ternura a causado.
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Pero, ¿cuál es la verdadera historia de este tierno cuadrúpedo?
Por su apariencia, todo el mundo pensó que el “saqueadorcito” era un perro callejero, sin embargo, es todo lo contrario, su nombre es Max y es un perro de casa, aunque su familia asegura que prefiere dar largos paseos por la calle.
Por su apariencia, todo el mundo pensó que el “saqueadorcito” era un perro callejero, sin embargo, es todo lo contrario, su nombre es Max y es un perro de casa, aunque su familia asegura que prefiere dar largos paseos por la calle.
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Además es fanático de las botanas, por lo que al ver que había una bolsa solitaria en medio de actos vandálicos, no dudó en tomarla para después saborearla.
El día de ayer la cuenta de Facebook ‘Línea de Fuego Chetumal’ subió un video donde el gerente de la tienda Dunosusa, que fue saqueada por Max, le regaló un costal de croquetas al perro, quien iba acompañado de sus dueños y en donde se le ve con mejor semblante, al parecer le dieron un buen baño y ya hasta parece otro.
KP
