Encerró a su hijo por más de un año en un lugar inmundo ¡pero la descubren!

Ninguno de los habitantes de Toquerville, Utah, podían creer que su comunidad se presentara uno de los peores casos de abuso infantil, luego Brandy James fuera detenida por encerrar a su propio hijo en un baño durante más de un año.

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De acuerdo con el reporte de las autoridades fue que el pequeño, de ahora 12 años, había sido encontrado en la parte superior de la casa, donde se hallaba el baño y cuando lo rescataron solo pesaba cerca de 16 kilos.

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El sherif del condado señaló que las condiciones eran verdaderamente horribles, pues el niño estaba encerrado junto a un inodoro lleno de excremento y los interruptores de luz estaban cubiertos con cinta adhesiva, así que suponen que todos estos días estuvo en la oscuridad.

El pequeño fue auxiliado porque estaba muy débil y no podía quitarse ni mantenerse en pie.

“He visto las imágenes. Son espantosas”, le aseguró el alguacil del condado de Washington, teniente David Crouse a la afiliada de CNN KSL. “He visto otras cosas horribles, pero esta es una de esas que nunca olvidaré. Me gustaría no haberla visto”, añadió.

El menor fue trasladado de inmediato al hospital y los médicos añadieron que la “víctima estará bajo observación por lo menos tres semanas para poder sanarlo y lograr una condición saludable”, según lo registró el comunicado oficial del aguacil.

Ahora la madre es investigada y también se encontraron otros dos menores, quienes no presentaban ningún signo de abuso.