Abuelos golondrina: sus riesgos y cómo cuidar de su salud
Muchos de estos abuelitos sufren de estrés o problemas emocionales por el constante cambio de vivienda.
Redes sociales, Pixabay
¿Alguna vez has escuchado hablar del término abuelo golondrina? Hablamos de una situación muy habitual, sobre todo cuando los adultos mayores no pueden estar solos y deben ser cuidados por sus familias.
Debido a circunstancias de salud o viudez, muchos adultos mayores que no pueden valerse por sí mismos, se ven obligados a mudarse a las casas de sus hijos de manera temporal, situación que impacta en su estabilidad física, emocional y en la convivencia familiar.
De acuerdo con el INEGI en México hay 15.4 millones de personas mayores de 60 años o más, de los cuales 1.7 millones de ellos viven solos; sin embargo, 7 de cada 10 de estos adultos tienen algún tipo de discapacidad o limitación, por lo que necesitan ser cuidados de uno o varios familiares.
Los cambios de domicilio constante pueden originar problemas emocionales o de estrés, ya que muchos de ellos llegan a sentirse como una carga ya que dependen de sus hijos, nietos y yernos para que los auxilien en actividades diarias como: alimentarlos, asearlos y darles esparcimiento.
Pero eso es solo el principio, están sujetos continuamente a adaptarse a los espacios del nuevo domicilio, lo cual conlleva dificultades como: subir escaleras, espacios fríos, con poca luz y reducidos, que les impide su movilidad y/o causarles un accidente.
Su tranquilidad se ve afectada, el cambio de domicilio puede aumentar la inseguridad si el barrio no es seguro, si es ruidoso o carece de servicios básicos; además deben acoplarse a nuevos horarios y reglas. Lo más preocupante de la situación es que surgen problemas de convivencia y aumenta el riesgo de sufrir maltrato físico por desacuerdos o que no se toma en cuenta su opinión.
¿QUÉ HACER PARA UNA MEJOR ACLIMATACIÓN FAMILIAR?
- Cuida su aseo personal: ayúdenlo para prevenir enfermedades, malos olores y fomentar buenos hábitos; se sentirá protegido y querido.
- Ofrécele intimidad, rutina y tranquilidad para favorecer su bienestar.
- No cambies sus horarios de comida y descanso, así como de medicación, caminatas o practicar un hobbie; la rutina es importante en esta edad.
- Mantenlo socialmente
- conectado; en especial con su círculo de amistades, es vital para su bienestar emocional.
- Alarga su estancia lo más que puedas para no alterarlo con los cambios continuos o repentinos.
- Adapta la casa para evitar accidentes, con agarraderas, andaderas, sillas para bañarse, etc.
- Los asilos pueden ser una solución; sin embargo, para muchas familias esto no es posible por sus altos costos y porque pocos son gratuitos.