El juego es una herramienta perfecta para que tu hijo se exprese
Los ayuda a tener seguridad y confianza en sí mismo, los dos pilares de la autoestima

Juego de niños
/Pixabay
La mejor manera de ayudar a los niños, de entre 2 y 5 años, a lograr un sano desarrollo es el juego. Éste es una herramienta que les ayuda a expresar sus emociones, desarrollar destrezas, asimilar y procesar experiencias difíciles y tener amigos.
El juego también les sirve para formar dos pilares del autoestima, la seguridad y confianza en sí mismos, siendo ésta la forma más fácil con la que cuenta un niño para dar sentido a cada una de las experiencias de vida. Por ello, los padres y madres deben estimular a sus hijos y también deben participar ellos.
Por ello te damos estas recomendaciones:
-
Los padres de familia pueden ayudar a sus niños a identificar las emociones con teatro guiñol.
-
Los personajes hecho títeres les facilitan a los pequeños hablar de emociones, les ayudan a entender y fomentar la expresión de sus sentimientos al interactuar con ellos.
-
Una intervención oportuna y adecuada de un profesional en terapia infantil puede devolver a un pequeño la paz y felicidad, a las cuales tienen derecho, así que llévalo.
Además, el juego es utilizado como terapia para ayudar a los menores a manera la ira excesiva, el miedo, el estrés o la preocupación. Lo anterior, porque estas emociones provocan conductas inadecuadas que pueden afectarles en el desarrollo de alguna de sus áreas: en su relación con amigos, familia y desde luego con sus padres y hasta ocasionar algunos trastornos. Además les ayuda a procesar y aclarar los sentimientos confusos.
Lo ideal es organizar sesiones de 30 a 45 minutos, donde se incluyan a los adultos, esto permitirá al terapeuta centrarse exclusivamente en las necesidades del pequeño a través del juego.
Por último, checa si tu hijo tiene estos trastornos o vivió alguna de estas situaciones para que reciba terapia:
-
Trastorno de Déficit de Atención (TDAH)
-
Separación de los padres, divorcio o conflictos
-
Violencia doméstica
-
Hospitalización
-
Experiencias estresantes, como la pérdida enfermedad o muerte de un ser querido.
-
Accidente grave o un desastre natural