Daniela Berriel teme por su seguridad y la de Gonzalo ’N’
@TVNotas | Ahora que Gonzalo N quiere ayudarla tiene miedo de que algo pueda ocurrirles.
/Redes sociales
“Con sentimientos encontrados porque fue muy fuerte para mí verlo”.
“Lo vi muy nervioso, le temblaban las manos”.
-¿Ya se dio un veredicto?
“No, el magistrado podía darlo ese día, pero decidió hacerlo hasta el miércoles (7 de julio). Hubo muchas irregularidades en la audiencia y eso me molestó”.
-¿Cuáles?
“La principal fue que no aceptaron la declaración de Gonzalo y con eso están violando nuestros derechos humanos. Sé que cometió un error muy grave y ya está pagando las consecuencias, pero él no me violó”.
-Él no está en México, pero ¿iba a declarar en la audiencia virtual?
“Sí, y la defensa de Eduardo estaba muy nerviosa porque sabía perfectamente lo que Gonzalo iba a decir. Si el magistrado no giraba una orden de aprehensión teniendo esa declaración, iba a ser más que obvio que eso está comprado”.
-¿Cómo decidiste otorgarle el perdón a Gonzalo “N”?
“Hablé con sus abogados y me comentaron que él estaba mal, creo que está arrepentido, quiere ayudarme y hacer las cosas bien, eso me bajó el enojo y resentimiento hacia él”.
-¿Por qué crees que lo haya hecho?
“Porque sabe lo difícil que se está poniendo el proceso y lo complicado que es luchar contra Eduardo, ya que éste tiene poder económico y político. Incluso, sus abogados me dijeron que Gonzalo tiene mucho miedo porque sabe que está en la mira de Eduardo y que corre riesgo, por eso primero quería ver la forma de estar seguro”.
-¿Tienes miedo de que hagan algo en su contra para que no pueda testificar?
“Sí; sin embargo, vi que ya abrió su Instagram y yo creo que si no revocan la orden de aprehensión, él lo contará todo en un en vivo”.
¿Temes que te pase algo?
“Claro, pero el miedo no me va a paralizar, y si algo me pasa, me iré tranquila sabiendo que luché hasta el final como una mujer digna”.
-¿Estás yendo a terapia?
“Sí, llevo tres meses yendo con una psicóloga y tomo dos clases de terapia: una es de psicoanálisis, que me está ayudando mucho a entender lo que me pasó, a quitarme las culpas y a ser fuerte; la otra tiene que ver más con la energía y depurar lo negativo”.
-¿Todavía hay momentos en los que te vienes abajo y te derrumbas?
“Sí, cuando la Fiscalía me da estas sorpresas me da mucho dolor. Me enojo al ver la corrupción y tráfico de influencias; no puedo evitar quebrarme y ponerme a llorar”.
-Se te han acercado otras víctimas de Eduardo “N”...
“Sí, dos: una fue por un abuso que no culminó en violación, pero otra sí fue violación. Una de ellas quiere denunciarlo públicamente; él es un violador serial, ya tenía un modus operandi”.
-Ojalá se haga justicia...
“Yo pongo todo en manos de Dios y sólo queda esperar esa justicia”, concluyó.
