Hogar-decoración
Si te regalaron un lindo arreglo floral, logra que dure en perfecto estado por varios días. Coloca algunos gajos de naranja dentro del florero y cámbialos cada tercer día; así no se marchitará tan rápido. ¡Sí Funciona!
Para que el apio vuelva a estar crujiente después de varios días, basta con que lo troces e introduzcas en un recipiente con agua, hielo y el jugo de medio limón. Después de 20 minutos, sácalo y estará listo para que lo uses.
Mezcla 1/2 litro de vinagre, 1 taza de agua y 30 gotas de aceite de eucalipto. Vierte en un recipiente con atomizador, para que puedas rociarlo. No sólo dejará impecables las superficies, también les brindará un agradable aroma.
Hazlo frotándolos con un cepillito de cerdas suaves y una mezcla de sal y agua, ponlos a secar al sol, después esparce spray, así parecerá que los acabas de comprar.
Para que esto no te suceda, pon un trozo de pan duro al agua que usarás para desinfectarla, transcurridos 10 minutos retíralo, enjuaga la legumbre, escurre y ponla entre dos toallas, para eliminar el exceso de agua.
Es muy fácil; pon a hervir una olla con agua y unas hojas de laurel, después llena una tina con agua fría, agrega un chorro de alcohol, el agua de laurel y las prendas; transcurridas dos horas, enjuaga y listo.
Necesitas 5 cucharaditas de aceite esencial de toronja y 1/2 litro de agua. Vacía en una botella con rociador, esparce por toda la casa y no sólo desaparecerá el aroma, también te sentirás con más energía pues la esencia de los cítricos energetiza.
Con el tiempo, tu plancha llega a mancharse de la superficie con ciertas prendas, y desafortunadamente mancha otras. Para limpiarla, sólo tienes que deslizar una aspirina por esa parte, pero debe estar tibia; después pasa un trapo húmedo y toda la suciedad desaparecerá.
Para ello vierte vinagre blanco en un recipiente y sumerge el lácteo dentro de él por unos segundos. Retíralo, guárdalo dentro de una bolsa de plástico con cierre hermético, e introduce dentro del refrigerador. El vinagre no afectará su sabor.
Logra que las manijas de tus puertas luzcan brillantes, sólo tienes que humedecer un trapo con vinagre y frotar cada pieza, enseguida vuelve a hacerlo con un paño seco.
Si picas hierbas frescas como cilantro, perejil o yerbabuena, es probable que se forme un batidillo o queden trozos muy grandes; para evitarlo, lava las hojas, sécalas con una toalla de papel absorbente y córtalas con la ayuda de unas tijeras.
Si te quedó un poco de aguacate luego de preparar una ensalada o salsa, puedes guardar el trozo restante. Solamente le debes untar un poco de aceite de oliva. Después, cúbrelo con papel aluminio y mételo en el refrigerador. De esta forma, durará, sin ennegrecerse, hasta por tres días.
Si los cuchillos se han oxidado, existe una manera fácil de acabar con el problema, sólo frótalos con un corcho impregnado en detergente en polvo; verás cómo quedan relucientes.
Para que éstos no se echen a perder rápidamente, sólo tienes que ponerlos en un recipiente con agua dentro del refrigerador. Pueden durar hasta un mes intactos.
La próxima vez que hagas limpieza en el armario y saques ropa que ya no vas a querer, retírale los botones con cuidado; tal vez te puedan servir para embellecer otros vestidos, o darle una apariencia diferente a la ropa de los pequeños.
Sólo debes introducirlo en una bolsa de algodón. Cada que se acabe, es necesario que la laves para evitar que en ella queden migajas que puedan crear hongos y echar a perder el que se guarde posteriormente.
Si tu ropa se te ha desteñido, no la deseches, mejor sumérgela en una solución hecha con 5 cáscaras de huevo hervidas en dos litros de agua. Hazlo cuando el agua esté fría. Después de un par de horas notarás que el color vuelve a ser más vibrante.
Para que te duren más tiempo, lo único que tienes que hacer es envolverlos con toallas de papel absorbente, después guárdarlos dentro de una bolsa de papel y ponlos en la parte baja del frigorífico.
Sumerge la prenda en un recipente que contenga leche tibia, deja que se remoje la mancha por espacio de una hora y luegolava con jabón de baño, para eliminar los restos.
Para impedir que el cereal se reblandezca por el tiempo, sólo debes cuidar que la bolsa se encuentre bien cerrada e introducirla en la parte baja del refrigerador.
Si preparas alguna ensalada o carne con huevos duros, existe un secreto para desprender la cáscara rápidamente: humedece tus dedos con un poco de mantequilla líquida y ¡listo!
Basta con voltear el molde sobre una bandeja y enrollarlo unos minutos con un paño mojado en agua caliente.
Si alguna de tus prendas se mancha de óxido por los broches de metal; prepara una solución con una cucharadita de jugo de limón y una de bicarbonato, frota sobre la zona efectada y enjuaga después de una hora.
Cuando guardas por mucho tiempo las cafeteras y los termos suelen acumular un aroma desagradable, para evitarlo sólo introduce algunos terrones de azúcar. Así cuando los vuelvas a utilizar estarán como nuevos.
Lava los vidrios con una solución de agua caliente y un chorrito de alcohol. Una vez que se sequen, desliza sobre ellas un borrador de los que se usan para quitar el gis en los pizarrones. Quedarán impecables.
Si tienes mascota en casa; rocía un poco de bicarbonato en la zona donde se acuesta frecuentemente. Evita que se orine en la casa y trapea el suelo con un chorrito de vinagre. Verás que el olor desaparece de tu hogar.
Primero corta ligeramente los tallos, después agrega una aspirina al agua y varios cubitos de hielo. Revivirán como por arte de magia.
Los juguetes de plástico pueden ser un foco de infección, por ello te recomendamos que los limpies a fondo, sólo necesitas meterlos en una tina, a la que habrás agregado 3 cucharadas de bicarbonato, después de dos horas frótalos con una esponja y enjuaga. Quedarán relucientes.
Introdúcelos en una cubeta con agua y añade una taza de sal; sácalos después de una hora y talla de la forma habitual, pero agrega un poco de pasta de dientes al cepillo. Cuando los enjuagues, te fascinará cómo lucen.
No sufras más cuando la receta de un postre requiera las claras a punto de turrón. Al empezar a batirlas, agrega unas gotitas de limón; no alterará su sabor, pero sí se expandirán en un abrir y cerrar de ojos.