Pacientes Covid mueren en sus casas sin atención médica, en México

La saturación en los hospitales a causa del alza de casos de Covid-19 destina a muchos enfermos del virus a morir en sus casas, frente a sus familiares y sin la atención médica oportuna.

Ese fue el caso de un hombre de 33 años que, a través de un video, se puede apreciar recostado en el piso de su casa, rodeado de tres personas que sollozan. “¡Reacciona!”, exclaman al inicio del clip. “Se me rompió el oxígeno, se me rompió el bote, ese tanque está lleno”, agrega alguien más refiriéndose a la máquina que ayuda a su familiar a respirar.

“Su corazón ya no tiene actividad y llevamos bastante tiempo acá. Hicimos las maniobras y sigue sin actividad su corazón”, explica lo que parece ser un paramédico durante un reportaje del noticiario de Ciro Gómez Leyva.

“¡Qué voy a hacer! ¡Ay, Dios mío!”, grita una mujer en medio del llanto, ante la impotencia de saber que ni los 20 minutos de masaje cardiaco que dieron a su ser querido lograron salvarlo del coronavirus.

Mientras tanto, un señor de 60 años que habitaba en Nezahualcóyotl murió en su hogar a causa de SARS-CoV-2 luego de haber sido rechazado del Hospital General de México el pasado 11 de enero por falta de cupo. A la 1:25 de la madrugada de ayer comenzó a agonizar, y aunque su familia llamó a una ambulancia, el personal de salud únicamente llegó a confirmar el deceso.

Otro hombre, quien además de Covid padecía diabetes, fue víctima de la alta demanda hospitalaria a causa de la pandemia. Murió recostado en el piso de su casa sobre una sábana. Una mujer aseguró que el finado tenía Seguro Popular. Pese a que paramédicos acudieron a su auxilio, fue demasiado tarde.

“En la semana tuvo tos y gripa, pero eso fue todo, ahorita lo llevé al doctor porque empezó en la mañana como a desvariar, yo pensé que tenía calentura, pero me dijeron que era su azúcar alta, entonces le inyectamos insulina y eso fue todo”, narró una fémina. “Ahorita el señor ya no tiene pulso”, le informó quien atendía al paciente.

Una persona más de sexo masculino, de 87 años, padeció el virus y la falta de atención hospitalaria. Sus familiares trataron de internarlo en un nosocomio privado, pero no tuvieron suerte.

“De hecho le habíamos puesto un suero porque desde hace 3 días no come nada”, dice una señora en un video, mientras está sentada junto al señor, quien no deja de moverse, pues la falta de oxígeno ya dañó su cerebro.

“Su situación es totalmente critica. La situación que tiene para mejorar en el hospital es prácticamente muy baja. Es la situación, no te voy a mentir”, le indica quien parece ser un experto.

En el noticiario presentaron un caso más, el de una señora cuya única esperanza de recuperarse de la enfermedad estaba en un médico que la atendía vía WhatsApp, pues los doctores se negaban a visitarla por temor a contagiarse. Tampoco tuvo la oportunidad de ser atendida en una clínica particular de bajo presupuesto.

De acuerdo con la Secretaría de Salud, México reportó ayer 21, 366 nuevos casos de Covid-19, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia.