Hija de Bruce Willis conmueve con desgarradora carta al actor: “Mi papá luchaba en silencio”

• Tallulah Willis, compartió una emotiva carta recordando los primeros signos del deterioro de la salud de su padre.

Hace varios meses, la familia de Bruce Willis hizo pública la triste noticia que el actor sufría demencia frontotemporal, una enfermedad que provoca alteraciones en la conducta, además de perjudicar al habla, situación a la que toda su familia a enfrentado sin chistar.

Sin embargo, es ahora su hija Tallulah Willis, quien le ha escrito una emotiva carta en la que habla sobre cómo está viviendo esta situación con su padre.

La joven, de 29 años, relató que su padre tenía mucho tiempo presentando diferentes síntomas, sin embargo, ella creía que su padre solo la estaba ignorando.

“He sabido que algo andaba mal durante mucho tiempo. Comenzó con una especie de falta de respuesta vaga, que la familia atribuyó a la pérdida de audición. Más tarde, esa falta de respuesta se amplió y, a veces, lo tomé como algo personal. Había tenido dos bebés con mi madrastra, Emma Heming Willis, y pensé que había perdido interés en mí.”, redactó.

Y es que la joven explicó que a la par de su padre, ella estaba atravesando por varios problemas de salud, ya que sufría de anorexia y adicciones.

También, recordó que tenía apenas 20 años cuando dejó sus adicciones y a los 25 tuvo que ser internada en una clínica para tratar su depresión.

“La verdad es que yo mismo estaba demasiado enfermo para manejarlo. Durante los últimos cuatro años, he sufrido de anorexia nerviosa, de la que he sido reacio a hablar porque, después de estar sobrio a los 20 años, la restricción de alimentos se ha sentido como el último vicio al que tengo que aferrarme. Cuando tenía 25 años, ingresé en un centro de tratamiento residencial en Malibú para tratar la depresión con la que había vivido durante mi adolescencia.”, continuó.

Finalmente y ante todo pronostico afirma con alegría que a pesar de la enfermedad que poco a poco deteriora al actor, su padre, la sigue reconociendo y se emociona cuando la ve.

“Todavía sabe quién soy y se ilumina cuando entro en la habitación. (Él siempre puede saber quién soy, más o menos el mal día ocasional. Una diferencia entre la demencia de Alzheimer y la DFT es que, al menos al principio de la enfermedad, la primera se caracteriza por deficiencias motoras y del lenguaje, mientras que la segunda presenta más pérdida de memoria.) Sigo saltando entre el presente y el pasado cuando hablo de Bruce: él es, él era, él es, él era. Eso es porque tengo esperanzas en mi padre que me resisto a dejar ir.”, puntualizó.