Harry & Meghan: las fuertes revelaciones del documental de Netflix

El príncipe Harry y Meghan Markle estrenaron hace unos días la primera parte de su documental para Netflix, en donde busca que el mundo conozca la verdad de su historia y corregir y desmentir lo que ellos consideran datos incorrectos desde que salió a luz su relación, boda y su salida de la Familia Real británica.

El documental está compuesto de seis episodios, de los cuales ya están disponibles los tres primeros, la docuserie está arrasando tanto en audiencia como en reacciones en medios y redes sociales. Aunque siempre se ha dicho que Meghan y Harry se conocieron a través de un amigo en común, sin embargo, gracias al documental descubrimos en palabras del propio príncipe Harry que se conocieron a través de Instagram.

Harry contó que vio a Meghan con un filtro de perrito tipo Snapchat junto a un amigo y quiso saber quién era ella. Esa persona en común le dijo a la actriz que el príncipe quería conocerla. Antes de responder, Meghan quiso ver la cuenta secreta que el hijo del rey Carlos tenía en la red social que, por cierto, estaba llena de fotos de sus viajes a África y solo entonces accedió al encuentro.

Meghan confesó que se encontraba viajando por Europa con sus amigas, pero luego de contactarse decidieron verse por lo que cenaron dos noches seguidas en el Soho House de 76 Dean Street. Seis meses después de su primer encuentro viajaron a Botsuana en una escapada de cinco días, en donde acamparon juntos y solos bajo las estrellas. Ambos describen este viaje como la prueba definitiva.

Tras salir a luz su romance, Meghan recordó una conversación que tuvo con Harry, cuando ella seguía grabando la serie Suits, en la que le advirtió sobre cómo comportarse frente a los paparazzis.

Luego de encuentro con nueve o diez reporteros al salir del estudio de grabación, con los que tuvo una breve conversación, Harry le dijo: “no puedes hablar con ellos”; “Y yo le dije: ‘solo intento ser agradable, no sé qué hacer, nunca he lidiado con esto antes’”; y él respondió: “Sí, pero los medios de comunicación del Reino Unido están diciendo que te encanta. Estás sonriendo. Te encanta”.

El príncipe Harry también contó cómo preparó su propuesta de matrimonio: “Abrí una botella de champán mientras ella hacía un pollo”. Con ayuda de Guy, el perro de Meghan Markle, instaló en los jardines Norte de Kensington quince velas eléctricas y una manta blanca sobre la que arrodilló y ella dijo que sí.

Este romántico momento tuvo lugar en noviembre de 2017, a pesar de que él deseaba haberlo hecho antes; tuvo que esperar a la aprobación de su abuela, Isabel II, pues según explicó las seis primeras personas en la línea de sucesión deben pedir permiso al monarca para poder casarse.

Por su parte, Meghan Markle aseguró que en el anuncio ante la prensa de su compromiso y la entrevista con la BBC no fue más que ‘un reality show orquestado’ y confesó que ‘no se nos permitió contar nuestra historia’. La actriz dice que eso había sido ensayado, algo que ratifica Harry.

En el segundo y tercer episodio de la serie se centran en el acoso de los tabloides británicos desde el inicio de su relación. Meghan Markle fue duramente criticada por tener una madre afroamericana y un padre blanco. El acoso llegó a tal nivel que los vecinos de la actriz recibieron pagos para instalar cámaras que vigilan sus entradas y salidas en Toronto, Canadá, la ciudad donde Markle grababa la serie Suits. Una vez que se anunció el compromiso, la situación empeoró pues el hostigamiento de la prensa llegó a sus familiares de la actriz.