Salud de Pelé empeora; aseguran que familiares se preparan para despedirlo

Pelé fue llevado al nosocomio, el 29 de noviembre, para una reevaluación de su tratamiento de quimioterapia contra el cáncer de colon detectado en septiembre del año pasado, y para tratar una infección respiratoria derivada de un contagio reciente de covid, según los médicos y su familia.

En el boletín anterior, del 12 de diciembre, el equipo médico había informado que Pelé mostraba “una mejora de su estado clínico, en especial de la infección respiratoria”, pero que continuaba sin una previsión de alta.

Desafortunadamente, el panorama del estado de salud de Pelé es poco alentador hasta este miércoles 22 de diciembre. Más allá del comunicado del Hospital Albert Einstein en el que está ingresado desde hace casi un mes, el medio Infobae asegura que sus familiares han comenzado a despedirse porque el cáncer de colon y otros problemas parecen irremediables.

En diciembre, Pelé lanzó este comunicado:

De acuerdo a la información de dicho medio, la esposa de O’Rei y dos de sus hijas están en todo momento acompañándolo en el sanatorio, pues será ahí donde pasen las fiestas decembrinas, pues no es viable llevar a Pelé a casa para las celebraciones.

“Nuestra Navidad en casa fue suspendida. Decidimos junto con los médicos que, por varias razones, será mejor que nos quedemos por aquí, con todo el cuidado que esta nueva familia (del hospital Albert Einstein) nos da”, escribió en Instagram Kely Nascimento.

“Transformaremos el cuarto de hospital en un sambódromo (es broma), hasta prepararemos caipiriñas (¡esto no es broma!)”, añadió Kely en el mensaje publicado poco antes del boletín médico.

Según el medio, el astro dicta un estado de salud crítico, donde el cansancio no lo deja hablar, además de un problema pulmonar, el riñón que le queda está fallando; sin embargo, hace poco estuvo muy pendiente de la Selección Brasileña y de la coronación de Argentina en Qatar 2022 pues era la única actividad que podía llevar a cabo.

Por otra parte informaron sus familiares que su corazón aún responde, aunque se prevé que pueda sufrir algunas complicaciones en el corto plazo. Los médicos del hospital combaten ahora para prevenir los efectos de una involución aún mayor de su cuadro.

Bajo este contexto, familiares y las autoridades gubernamentales brasileñas se mantienen alertas. Y empiezan a organizar su funeral: el plan sería realizar un velatorio íntimo para la familia y al cabo de unos días abrir la cancha del Santos, donde Pelé debutó en 1956 a los 16 años, para conmemorar una despedida popular. Se presume que los restos del astro descansen en un cementerio privado.