Miguel Herrán, quien alcanzó fama por su participación en La Casa de Papel, ha mostrado ser un actor entregado y disciplinado, a pesar de haber pasado por momentos complicados tras sufrir vigorexia.

En una entrevista el famoso, habló del momento en el que se obsesionó por tener un cuerpo musculoso y con el tiempo padeció una vigorexia la cual es una dismorfia muscular es una alteración de la imagen corporal.

“He sido un obseso, he tenido vigorexia, me veía delgado pesando 80 kilos. Ahora, con 67, me veo perfecto. Sé que no tengo una tableta espectacular, que mis bíceps están acortados o que mis dorsales son irregulares, pero

me gusta lo que veo”, mencionó Miguel Herrán.

Ahora el actor español mencionó que acepta y le gusta su cuerpo como es, aunque sigue enfocado en el deporte, uno de sus más recientes descubrimientos es la calistenia, una serie de ejercicios físicos que se realizan con el propio peso corporal.

Además, Miguel se sinceró sobre los obstáculos que ha tenido a lo largo de su carrera: “No era una persona que tuviera sueños ni esperanzas. Era un tío que se hundía en un pozo y hundía con él a todo el que quería”.

Cabe señalar que la enfermedad que sufrió el actor es un trastorno del comportamiento en el que la persona se obsesiona con poseer un cuerpo musculoso, y por ello se vuelven adictos al ejercicio físico.

Además, quien parece esto también comienza a consumir de manera exagerada proteínas, esteroides y carbohidratos con la finalidad de aumentar la masa muscular.