Alexandra Beffer intentó suicidarse cuando le dijeron que no recuperaría la vista

La actriz, productora y locutora, Alexandra Beffer, de 53 años, conocida por su actuación en programas como ‘Las solteras del 2’ y emisiones radiofónicas como ‘Mujeres en acción', ‘A toda carrera con la Pelayo’, entre otros, desea retomar su carrera en los medios de comunicación luego de que hace siete años una enfermedad la alejó de su pasión e incluso, la hizo perder la vista.

-Alexandra, muchísimo tiempo sin saber de ti, ¿qué ha sido de tu vida?

“Pues me retiré del medio del entretenimiento hace unos años, me retiré por cuestiones de salud, como te puedes dar cuenta, estoy ciega, no veo, entonces esto influyó a que decidiera dejar mi trabajo”.

-¿Cómo fue?

“Para un locutor su herramienta de trabajo es su voz, pero es necesaria la lectura y la escritura, un día me doy cuenta que se me movieron las letras, fueron pasando los días y ya no veía, a una distancia corta yo ya no veía y todo mundo me decía: ‘Tienes vista cansada’, decidí ir al oftalmólogo, pero al momento de revisarme la doctora me dijo: ‘No hay nada que hacer, tus ojos se están muriendo y cuando tus ojos se terminen de morir te los vamos a tener que sacar’ porque si los dejan obviamente se pudren y se puede infectar mi cerebro y me muero”.

-Seguro fue muy difícil...

“Espantoso, pero el día que fue más doloroso fue cuando se murió mi ojo, se hizo como pasita, yo creí que me estaba llorando el ojo, no, mi amor, se estaba vaciando, cuando se reventó los doctores me dijeron: ‘ya se murió tu ojo, te lo tenemos que sacar’, eso fue con el ojo derecho”.

-En este momento ¿cómo es tu visión?

“A ratos puedo ver, a ratos no veo absolutamente nada y a ratos veo sombras, incluso cuando veo, veo cómo una persona normal, podría incluso manejar, pero esos lapsos me duran 10-15 minutos”.

-¿Te costó trabajo aceptar tu nueva realidad?

“Muchísimo, la realidad es que intenté suicidarme, dije ‘Así no quiero vivir’, es una desesperación, es una angustia, es renegar de Dios, yo decía ‘Señor, si yo he ayudado a tanta gente, si no soy mala persona ¿por qué?’ Y simplemente así yo no quería vivir”.

-¿Qué hiciste?

“Hice una carta póstuma para mi hijo y como te dan medicamentos, ansiolíticos, para que aguantes tanta cama y estés tranquila, agarré la charolita y me las tomé".

-¿Te gustaría retomar tu carrera?

“Me encantaría, pero no es tan fácil como yo pensaba, ya me han cerrado puertas. Fui con mis proyectos bajo el brazo a Fórmula para presentarlos y pedir regresar porque se apagaron mis ojos, pero no se me apagó la voz, pero me dijeron que me ubicara, que yo ya no era la misma, que no iba a ser locutora otra vez, en otro lugar también me lo hicieron y claro que me deprime”.