Reduce las molestias de la enfermedad oclusiva de las arterias con estas recomendaciones
¿Qué es la enfermedad oclusiva de las arterias?
Ocurre cuando las arterias femoral y poplitea, ubicadas entre el muslo y la rodilla, se obstruyen y se endurecen, principalmente en su superficie.
Ocurre cuando las arterias femoral y poplitea, ubicadas entre el muslo y la rodilla, se obstruyen y se endurecen, principalmente en su superficie.
¿Qué síntomas tiene?
Cansancio y pérdida de fuerza en las piernas, Sensación de desequilibrio, Adelgazamiento de la piel, Problemas de circulación sanguínea.
Cansancio y pérdida de fuerza en las piernas, Sensación de desequilibrio, Adelgazamiento de la piel, Problemas de circulación sanguínea.
PREGUNTA:
Desde hace tiempo he sentido que parte de mis piernas y pies han perdido vello, siento la piel muy delgada, incluso como que se transparenta, y me arde; también se me están contrayendo los músculos y seguido me dan calambres. Fui a ver al médico y me dice que probablemente tengo una enfermedad de las arterias. ¿Me podría orientar sobre esto, por favor? Muchas gracias.
Desde hace tiempo he sentido que parte de mis piernas y pies han perdido vello, siento la piel muy delgada, incluso como que se transparenta, y me arde; también se me están contrayendo los músculos y seguido me dan calambres. Fui a ver al médico y me dice que probablemente tengo una enfermedad de las arterias. ¿Me podría orientar sobre esto, por favor? Muchas gracias.
RESPUESTA:
Por lo que me cuentas, podría tratarse de una enfermedad oclusiva de las arterias femoral y poplitea, ubicadas en la región del muslo y de la rodilla, lo cual ocurre cuando se obstruyen y se tornan aterioscleróticas, es decir, se endurecen, sobre todo en la parte más superficial. Los principales síntomas son cansancio y pérdida de fuerza en las piernas, así como sensación de desequilibrio, es decir, como que uno siente que se va a caer; también en la parte inferior de la pierna y del pie se caracteriza por lo que te pasa a ti, es decir, se pierde el vello, se adelgaza la piel y su parte grasosa, además de que disminuye el tamaño de los músculos.
Por lo que me cuentas, podría tratarse de una enfermedad oclusiva de las arterias femoral y poplitea, ubicadas en la región del muslo y de la rodilla, lo cual ocurre cuando se obstruyen y se tornan aterioscleróticas, es decir, se endurecen, sobre todo en la parte más superficial. Los principales síntomas son cansancio y pérdida de fuerza en las piernas, así como sensación de desequilibrio, es decir, como que uno siente que se va a caer; también en la parte inferior de la pierna y del pie se caracteriza por lo que te pasa a ti, es decir, se pierde el vello, se adelgaza la piel y su parte grasosa, además de que disminuye el tamaño de los músculos.
Cuando el paciente eleva la pierna, ésta se pone rojiza y después se torna pálida al quedarse sin sangre; y cuando la baja, su llenado es lento. Los pies pueden sentirse fríos.Para el diagnóstico, generalmente basta con una historia clínica completa y un ultrasonido doppler, así como estudios complementarios. El tratamiento dependerá de cada paciente y puede incluir analgésicos, desinflamatorios y otros medicamentos, según la causa del padecimiento.
Elabora esta infusión:
- 1 cda. de cola de caballo
- 1 cda. de sanguinaria
- 1 cda. de hierba del sapo
- 1 cda. de castaño de indias
- 1 cda. de fenogreco
- 2 litros de agua
Hierve por 10 minutos, cuela y toma como agua de tiempo, durante dos meses.
Prepara este licuado:
- 1⁄2 rodaja de piña
- 1⁄2 nopal, mediano
- 1⁄2 diente de ajo
- 1⁄2 vaso de jugo de naranja
- 3 hojas de árnica, frescas
Licúa los ingredientes y bebe diariamente en ayunas, cinco días por semana, durante un mes.
Es importante que estés atento a la sintomatología, ya que una claudicación mayor de las piernas, dolor, inflamación o un tono azulado de la piel, así como cansancio o fiebre, pueden estar encubriendo un cuadro más grave. Mantén al tanto a tu médico.
Sigue estas recomendaciones:
- No te des masajes: Ya que esto puede complicar el padecimiento. Procura caminar cada 55 minutos y hacer ejercicios de pararte en la punta y el talón, para mejorar tu circulación.
- Evita los zapatos de piso: Tu calzado debe tener un tacón de tres a cuatro centímetros. Duerme con pantimedias de mediana compresión y una almohada entre las piernas.
- Colócate una bota de barro con té de árnica: Con un espesor de tres centímetros y cúbrela con una venda sin apretar; déjala 20 minutos. Aplícala cada tercer día durante un mes.