El actor de 91 años, Sergio Corona, nos cuenta que no le tiene miedo a la muerte y esto esto es lo que piensa: “Donde suceda la muerte, está bien; acostado en una cama, en un hospital o en un escenario, ¡bienvenido!”, quiere que cuando esto suceda sus cenizas sean esparcidas en un jardín que lleva su nombre en Pachuca y que pongan un letrero que diga: ‘Prohibido mearse aquí’.