Luego de cuatro días de juicio en donde hubo testificaciones y evidencia, don Pedro Rivera fue declarado inocente del delito de acoso sexual del que lo acusaba Fabiola Ávalos, una exempleada.

Durante esta semana se retomó el juicio en contra del padre de Lupillo y Jenni Rivera, luego haberse detenido a la pandemia de Covid-19, en el cual se determinaría su situación legal, tras haber sido denunciado por tocamientos indebidos y propuestas indecorosas, además, de violencia laboral por parte de una de sus ex empleada de la disquera Cintas Acuario.

El padre de la familia Rivera quedó absuelto de 6 de los 7 cargos que se le imputan, sólo fue acusado del ‘reporte de pagos (pay stubs)’ porque ‘no lo tenían ordenado debidamente’, reportaron varios medios de comunicación estadounidense.

A su salida de la corte, Pedro Rivera agradeció a los medios de comunicación por seguir su caso, sin dar más declaraciones sobre lo sucedido, pues aseguró que pronto daría entrevistas al respecto.

“Gracias por asistir a este evento tan vergonzoso”, dijo antes de interpretar ante las cámaras el fragmento de una canción para celebrar el Día del Padre.

Fabiola Ávalos trabajó durante casi 20 años en la disquera ‘Cintas Acuario’, propiedad de Pedro Rivera, a quien acusó de haberla despedido injustificadamente y de acoso sexual. Además en una de las audiencias, la mujer dijo que fue tocaba indebidamente por el padre de Jenni Rivera durante el horario laboral. Señaló que fue despedida injustificadamente por no haber accedido a sus intenciones: “Yo llegué a pensar que era porque yo no correspondí a sus intenciones”.

También lo acusó de haber sido agredida físicamente frente a su familia por presuntamente filtrar información de la familia Rivera y humillarla en presencia de sus compañeros de trabajo. Fabiola Ávalos pretendía una compensación de 500 mil dólares.