Pedro Sicard nos confiesa sus más íntimos secretos
Pedro Sicard nació hace 53 años en La Habana, Cuba, pero tiene más de la mitad de su vida radicando en México, país al que llegó gracias a una gira que el Ballet Teatro de La Habana hizo por el país.
En ese entonces, viajó al lado de la primera bailarina Caridad Martínez, con quien procreó a su único hijo, Pedro Pablo, actualmente de 25.
En entrevista a distancia, debido a la pandemia, el cubano platicó con nosotros sobre su vida y que desde hace un año no ha parado de trabajar pese a la crisis sanitaria, lo cual lamentablemente le causó una crisis de ansiedad que le obligó a pedir ayuda profesional. Esto y más nos contó:
-Tu apellido Sicard es de origen francés, ¿cómo llega tu familia a Cuba?
“Mi abuelo, Armando Sicard, llegó a Cuba para trabajar en los ferrocarriles y ahí conoció a mi abuela Angelina. Mi papá tuvo tres hijos: mi hermana Diana, la mayor; mi hermano Alejandro y yo. Mi papá nació en Cárdenas, Matanzas, cerca de La Habana, y mi mamá es cubana de ascendencia española, pues mi abuelo era gallego, somos una mezcla”.
-¿Cómo fue tu niñez?
“Vengo de un seno muy familiar. Los domingos recuerdo la misa en mi casa llena de tíos, madrinas, padrinos, primos. Mi infancia fue feliz porque tuve a mis padres cerca”.
-¿Eras travieso?
“No, era bastante introvertido. Me gustaba mucho la natación y el polo acuático”.
-¿Llegaste a competir en eventos deportivos?
“Sí, en competencias nacionales, tengo mis medallas por ahí”.
-¿Te interesaba llegar a unos Olímpicos?
“No, nunca tuve el espíritu de competitividad, lo hice porque en mi casa había alberca y desde niños, mi hermano y yo aprendimos a nadar, pero sólo lo hacía por diversión; de hecho, luego dejé la natación por el polo acuático porque me divertía más”.
-¿En qué momento decidiste que serías actor?
“Estaba en un grupo de aficionados de teatro en la prepa porque me divertía mucho y de pronto dije: ‘Creo que quiero ser actor’. Comencé a los 17 años en el Instituto Superior de Arte, donde pasé cinco años”.
-¿Cómo fueron los años de escuela?
“Aprendí muchísimo, es una escuela muy completa, sales con nivel superior. Tuve un maestro que era como la eminencia del teatro en Cuba, Vicente Revueltas, que ya murió. Él me dio toda la técnica del Actors Studio de Lee Strasberg”.
-¿En qué momento llegó tu primera oportunidad de trabajar como actor?
“Desde que era estudiante, mi primera obra profesional se llamó: Una rueda de casino, en el Teatro Nacional de Cuba, y la dirigió Armando Suárez hasta el 94. Después, estuve en la compañía de danza y teatro que se llamó Ballet Teatro de La Habana, hacíamos giras por el mundo hasta que se desintegró”.
-¿En qué momento decides salir de Cuba?
“Cuando empezó ‘El periodo especial’, una época de mucha escasez y hambruna; no quería que mi carrera se estancara porque estaba joven. Ya había estado en México de gira en dos ocasiones, siempre me cautivó porque es fascinante y decidí venirme”.
-¿Después qué pasó?
“Durante este periodo nació mi hijo, Pedro Pablo, en Córdoba, Veracruz”.
-¿La mamá de tu hijo es cubana?
“Sí. Caridad Martínez fue una muy talentosa primera bailarina del Ballet Nacional de Cuba de Alicia Alonso, ahora es coreógrafa y maestra de ballet en Nueva York,”.
-¿Te casaste o fuiste papá soltero?
“Nunca nos casamos, vivimos en unión libre en casa de mis padres hasta que nos venimos a México”.
-¿Dónde la conociste?
“Trabajando en el Ballet Teatro de La Habana, ahí nació el amor. Al día de hoy, tenemos mucho que ya no somos pareja, pero tenemos un hijo en común y mucha comunión en el arte, nos gusta lo mismo y eso es muy padre”.
-¿Nada más quisiste tener un hijo?
“No fue que quise, simplemente nada más llegó uno. Yo era muy joven en aquel momento, tenía 27 años”.
-No estabas tan joven…
“Para mí sí. A los 30 todavía era muy inmaduro, sentí la necesidad de ser padre cuando cumplí 40 porque me sentía pleno y seguro económicamente”.
-Pero sí has sido un papá presente...
“Sí. Traté de ser siempre el mejor padre, pero siento que hubiera sido mejor a los 40”.
-¿Cuánto duraste con tu pareja?
“Como 10 años y estuve toda la infancia de mi hijo con él, pero su mamá se lo llevó para Nueva York a los 9 años”.
-¿Por qué se fueron?
“Por trabajo, no es sólo bailarina, sino una gran coreógrafa y maestra. Desde que se fue ha estado trabajando en las mejores compañías de Nueva York; ahora es maestra en la compañía The Ailey School”.
-¿Es cierto que tu hijo pensaba en ser actor?
“En un momento sí, ya después lo abandonó. De niño, cuando estaba en la secundaria y la prepa, quería ser actor y estuvo trabajando en Nueva York con su mamá, pero después, cuando lo traje a México para ver las grabaciones de novelas, ya no le gustó porque vio la chi$%& que era y me empezó a decir que mejor quería dirigir o escribir. Hoy por hoy estudia Diseño Gráfico”.
-¿Cuántos años tiene?
“25 años”
¿Todavía no te hace suegro?
“Bueno, suegro, sí, muchas veces, pero abuelo todavía no. Me gustaría que mi hijo me haga abuelo, pero ahorita, un hombre a los veinte y pico de edad, no tiene la madurez suficiente para educar a un hijo. Está bien así, que esté enfocado en sus estudios, es mi opinión”.
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-¿Te has vuelto a enamorar?
“Muchas veces, pero siempre he estado en unión libre, nunca me he casado”.
-¿Ni te casarás?
“No, ya estoy muy viejo, ya me quedé así”.
-¿Te gustaría llegar a viejo en compañía de tu pareja?
“Claro, sería increíble. Lo mejor es estar en pareja”.
-¿Qué te gusta de una mujer?
“Me encanta el sentido del humor, que me hagan de comer rico, que tenga sentido común y no deba estar explicando las cosas”.
-¿El físico es muy importante para ti?
“No. Me seduce mucho el talento, la inteligencia y la cultura; la belleza es totalmente relativa y pasa con los años”.
-¿Te aventarías a tener otro hijo?
“No, estoy muy enfocado en mi trabajo. La pandemia me ha dejado una gran lección, ahora digo que sí a todo lo que me caiga; descubrí que fue una terapia increíble para mí en este momento tan difícil. La llegada de la novela ‘Te acuerdas de mí' me ayudó porque estaba pasando por ataques de ansiedad y fue una maravilla, por eso ahora no quiero dejar de trabajar”.
-¿La pasaste muy mal?
“Me dio más hambre, no paraba de comer, me dio insomnio y estaba solo, entonces, fue doblemente fuerte para mí todo esto”.
-¿Estuviste tomando terapia?
“Sí, superé los temores con trabajo psicoterapéutico, trabajos de respiración y meditación”.
-Muchos actores y cantantes se vieron afectados económicamente...
“Yo vendí mi coche porque me dio un poco de angustia, no sabía cuando acabaría esto; ya me compré otro, afortunadamente”.
-¿Qué proyectos tienes en este momento?
“Apenas terminé la obra No molestar en horas de adulterio con Sandra Quiroz, ésta era presencial en Alessa Café. Ahora, me invitaron a participar en una serie de TV Azteca que se llama Un día para vivir y tengo otra propuesta de teatro con Anna Ciocchetti para la que ya iniciamos ensayos”, concluyó.