Mexicana que sobrevivió a la estampida de Seúl: “Es un milagro el haber sido salvada”
Tras la tragedia de Seúl, Carolina Cano aseguró que está viva “de milagro”.

Mexicana que sobrevivió a la tragedia de Seúl asegura que es un milagro que esté con vida
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- Carolina Caro y su amiga, Juliana Velandia, habían ido a visitar Itaewon cuando comenzó la estampida humana.
- Carolina Cano pensó que iba a perder la vida en aquel lugar, sin embargo, un coreano logró rescatarla a tiempo.
Hace unos días, Corea del Sur vivió una de sus peores tragedias luego de la estampida humana que se suscitó en un callejón en el barrio de Itaewon durante una celebración de Halloween, donde desafortunadamente 154 personas perdieron la vida.
Sin duda alguna, este hecho fue algo traumático para los supervivientes, quienes han contado que todo lo sucedido es algo difícil de asimilar. Tal es el caso de Carolina Cano, una mexicana que estuvo en el lugar de los hechos y pudo vivir para contarlo.
En entrevista para un conocido portal de noticias, Cano explicó que fue a celebrar el Halloween con su amiga Juliana Velandia en el distrito de Itaewon, cuando la gente empezó a congregarse sin control.
“Eran las 10 de la noche más o menos cuando observamos que en la zona ya había demasiada gente, así que decidimos regresar y tomar el Metro como de costumbre. Desafortunadamente decidimos tomar el callejón del accidente como nuestra vía de salida”, manifestó.
Ambas chicas se separaron por el caos que había en el lugar y Cano perdió su celular, impidiendo que pidiera ayuda, por lo que había comenzado a perder la esperanza: “En un punto, mis pies ya no estaban tocando el piso, ya había cuerpos debajo de mí. Había un muchacho que estaba inconsciente y me estaba aplastando y mis piernas estaban resultando tan aplastadas que dejé de sentirlas. Yo juré en un momento dado que iba a perder las piernas, que me las iban a romper, que nunca más las iba a poder mover”, expresó.
Sin embargo, la chica logró sobrevivir gracias a un coreano que la rescató entre la multitud: “Abrí mis ojos y vi que comenzaron a jalar gente, un policía o rescatista me jaló del brazo y así es como salí. Es un milagro el haber sido salvada en ese preciso momento”, indicó.
Tiempo después, y gracias a la ayuda de buenos samaritanos, la chica pudo reunirse con su amiga y ahora están recuperándose de lo sucedido, pero con ciertas secuelas tanto físicas como emocionales.
En el caso de Cano, solo fueron unos moretones, pero Velandia fue diagnosticada con rabdomiólisis, un padecimiento producido ante la falta de oxígeno a los músculos, pudiendo ocasionar daños en los riñones, entre otras secuelas.
Carolina Cano y Juliana Velandia son estudiantes de relaciones internacionales y medicina, respectivamente, que fueron a estudiar un semestre a Corea del Sur como parte de un programa de intercambio universitario.