Las últimas semanas para ella fueron complicadas para ella: se operó para extraerse polímeros de las pompas.
Alejandra Guzmán se dio un respiro en Cancún, pues después de haber estado mal de salud, la rockera viajó a Quintana Roo para presentarse en el Carnaval de Cancún.
“Sin importar cómo ni dónde, yo soy feliz por estar viva… ¡gracias a Dios!”, dijo la cantante.
Como hacía mucho calor, no dudaron ni un segundo en correr al mar para darse un chapuzón y refrescarse.
Ale estuvo sonriente y feliz todo el tiempo.
Cuando se cansaron, salieron del agua y regresaron al hotel.
La Guzmán y uno de sus mejores amigos, que también forma parte de su equipo de trabajo, llegaron a la playa cerca del mediodía y no se despegaron ni un momento.
Se la pasaron nadando cerca de media hora.
Se broncearon por más de una hora, luego tomaron sus cosas y volvieron al hotel.
Este día, la cantante utilizó un traje de baño color negro de una pieza.
Como en La sirenita, Alejandra fue despeinada por la ola.
Se broncearon por más de una hora, luego tomaron sus cosas y volvieron al hotel.
Tanto su amigo como ella estuvieron muy pendientes de las redes sociales y subieron algunas historias presumiendo cómo se la pasaban.