Captamos a Ludwika Paleta y Emiliano Salinas tras estar al borde del divorcio
El pasado mes de junio dimos a conocer que Ludwika Paleta, de 41 años, y su esposo, Emiliano Salinas, de 43, pasaban una fuerte crisis matrimonial, luego de que los relacionaran con la secta NXIVM, asociada con delitos sexuales. Platicamos con una persona cercana a la pareja, quien nos dijo que ese mal momento quedó en el pasado.
-Platícanos cómo van las cosas entre Ludwika y Emiliano...
“El escándalo que se hizo con el tema de NXIVM y que señalaran a Emiliano como uno de los líderes en México de esta organización, por poco termina con su matrimonio; pero poco a poco han tratado de volver a la normalidad”.
-Como dijimos, su relación se vio afectada...
“Por supuesto que sí, todo indicaba que Emiliano no iba a salir bien librado, por lo tanto, él como Ludwika se tuvieron que esconder de la prensa que los señalaba, pues tristemente la más afectada fue ella”.
¿De verdad no sabía nada?
“Ella nunca se ha involucrado en los negocios de su esposo y cuando la cloaca se destapó, a la que más criticaron fue a ella... por eso fue su molestia”.
-Me imagino el shock para ella...
“La gente le escribía cosas horribles y se sintió amenazada, pero te repito, Ludwika era la menos enterada de lo que ocurría. Por eso Emiliano se la llevó del país y lucharon hasta el día de hoy por su matrimonio”.
-¿Qué explicación le dio Emiliano?
“Se defendió, le juró que no sabía nada, que las cosas no eran como los medios las pasaron, y ella, como está muy enamorada, le creyó; además, cuando se destapó todo acababan de nacer los mellizos y Ludwika sólo vio por sus hijos”.
-¿Se podría decir que ya la libraron?
“Yo diría que sí, y en parte se lo deben a Nicolás (el hijo que ella tuvo con Plutarco Haza), pues él los apoya mucho”.
-Hace unos días, vimos a los tres (Ludwika, Emiliano y Nicolás) juntos...
“Y los seguirán viendo así, él siempre está presente en la vida de su madre; además, se lleva muy bien con Emiliano”, concluyó.