Celos de Bárbara Torres hacia La Chupitos ponen en riesgo gira de su obra; ¡casi se desgreñan!

La obra cómica Entre ellas, que se ha presentado en Estados Unidos con gran aceptación, bajo la producción de Ricardo Ortega, cuenta con un elenco de primera: Lis Vega, de 45 años; Bettina Salazar, de 47; Jocelyn Borras; Aida Pierce, de 66, y sus estrellas: Liliana Arriaga, La Chupitos, de 50, y Bárbara Torres, de 47, quien por cierto, según cuenta una persona de la producción, está celosa de la popularidad de Liliana, e incluso hace unas semanas se armó tremendo zafarrancho en la camioneta rumbo al hotel y ambas casi se ¡agarran a golpes!. Esto fue lo que no contó, gente de la producción:

-¿Cómo les va en la obra Entre ellas?
“Les está yendo de maravilla. Desde mediados de noviembre del año pasado están de gira por Estados Unidos, aunque no todo es miel sobre hojuelas”.

-¿Por qué lo dices?
“En todos los trabajos hay envidias y aquí no ha sido la excepción; ha habido malentendidos, desavenencias, pero lo que sí te puedo asegurar, es que el pleito entre Bárbara Torres y Liliana Arriaga está fuerte”.

-¿Y eso a qué se debe?
“Al principio, todo marchaba bien, había gran relación entre ellas, pero al pasar del tiempo, quien ha estado inconforme es Bárbara Torres”.

-¿A qué te refieres?
“Pues echa mucha carrilla; se dedica a echar sus habladas entre la producción y también reniega muchísimo”.

-¿De qué reniega?
“Sinceramente, la obra no le gusta nada, dice que a veces está harta, lo que le ha acarreado discusiones con varias de sus compañeras”.

-¿Qué más sucede?
“Pues no todo para ahí, desde hace unas semanas, trae pleito con Liliana, La Chupitos; está muy fuerte esta situación”.

-Pero, ¿cuál es la razón?
“Sinceramente, Bárbara está muy celosa de Liliana, porque seamos honestos: La Chupitos es la estrella etre la comunidad latina en Estados Unidos, ella abarrota el teatro y eso le molesta a Bárbara, quien se siente la estrella y todo el tiempo
se está quejando. En sí, la obra no le gusta para nada, y a cada rato le reclama a La Chupitos”.

-¿Qué le reclama?
“Cada uno pasa y hace su sketch en la obra; cuenta su historia con sus típicas frases, pero Liliana se pasa de tiempo, porque el público le pide que continúe, pues la gente no deja de reír y aplaudir, y Bárbara se la arma de a pe$% todo el tiempo, le dice que se pasó, y por todo discute”.

-¿Qué le dice Liliana?
“Nada; la verdad, la ignora, le dice que no puede cortar al público, que sería una falta de respeto y que ella se debe al mismo; pero las cosas continúan de mal en peor”.

-Cuéntame...
“En las últimas presentaciones de diciembre, La Chupitos estaba enferma de gripe, se puso mal, pero como toda una profesional, realizó su parte en la puesta, aunque al final de la obra se rehusó a tomarse fotos con el público”.

-¿Cómo?
“Sí, es que después de cada función, el elenco se toma fotos y cobran alrededor de 20 dólares la foto (casi 400 pesos), todas posan y ese dinero se lo reparten, es una buena lana y eso acordaron... Pero bueno, Liliana se negó por el cuidado de no contagiar a nadie, y Bárbara se enojó”.

-Pero fue por precaución...
“Sí, pero el problema fue que el público no quería fotos con Bárbara y no se generó el dinero esperado; por lo que Bárbara se enojó, porque no se ganó lo suficiente y durante el trayecto en la camioneta del teatro al hotel, ahí fue que explotó en contra de Liliana”.

-¿Qué ocurrió?
“Bárbara le reclamó a La Chupitos, le dijo que cómo era posible que no se diera el tiempo para tomarse fotos con el público por sentirse tan importante, cuando no lo es”.

-Cuéntanos, ¿qué más pasó?
“Bárbara le dijo que le bajara, que no se creyera tan importante, porque en todo caso, ella era la estrella de la obra, pues trabajó por años con Eugenio Derbez, que ella sí sabía lo que era el estrellato: ‘La famosa aquí soy yo, la gente me ubica por La familia P. Luche’, le dijo... y ahí fue cuando Liliana se prendió”.

-¿Y qué pasó?
“Liliana le respondió que no dijera sandeces, que si era famosa o no, a ella le valía, pues el público demostraba quién es la estrella, y era ella, pues ya tenía toda una carrera en Estados Unidos, pero que todas acudían a trabajar”.

-¿Luego?
“Pues ya Liliana se empezó a molestar, le dijo que no estaba para aguantar sus caprichos y que si no se sentía bien en la obra, si no le gustaba, pues que se fuera”.

-Bárbara, ¿qué respondió?
“Ahí se puso loquita, le gritó: ‘A mí no me tienes que decir nada; yo vengo acá (refiriéndose a Estados Unidos) solo por los dólares, a mí me gusta el dinero, no creo que tú trabajes por gusto”.

-¿Qué más ocurrió?
“No, pues ahí sí se armó la gorda y La Chupitos le respondió: ‘¿Famosa?... deberías estar agradecida, porque eres una inmigrante y te recogió México; México te hizo famosa’”.

-¡Qué fuerte!...
“No, pues Bárbara le gritoneó y le dijo que con ella no se metiera, que le bajara, y pues casi casi se le va a los golpes, la camioneta se paró y los de la producción las calmaron”.

-¿Qué hicieron las otras mujeres del elenco?
“Se sacaron cañón de onda, pero ninguna se quiso meter”.

-¿Ahí paró todo?
“El productor, Ricardo Ortega, habló con ellas, porque la producción le contó lo que había sucedido y se molestó; habló aparte con cada una de ellas y cada quien dio su versión. Pero la verdad es que Liliana es la megaconsentida, tanto del productor, como del público”.

-El productor, ¿qué les dijo?
“Que a él no le interesaban sus problemas. Sé que a Bárbara le llamó la atención de manera muy fuerte, y que ambas tienen un contrato firmado y deben de cumplir”.

-¿Seguirán en la obra?
“Sí, claro; ahora en el teatro, ambas se hablan, pero fuera de él, no. La obra va genial, llegaron a cincuenta fechas vendidas, así que tendrán que olvidar sus diferencias en lo que dure la puesta. Esperemos que esto no se salga de control, pero sí, La Excelsa se puso ¡Bárbara!”, concluyó.