Lisset comparte el legado que le dejó su papá, Willy Gutiérrez

Lisset es hoy, a sus 48 años, una de las artistas más completas y versátiles del medio, pues lo mismo hace comedia musical, teatro, cine y televisión, donde la vemos recientemente en la telenovela Mi fortuna es amarte. Sin embargo, en medio del éxito, en este momento atraviesa por uno de los tragos más amargos de su vida, al perder a su padre, el maestro Willy Gutiérrez, quien falleció el pasado 18 de enero, mismo día en que cumplía 76, a causa de cáncer linfático. Platicamos con la actriz y nos contó del honorable legado que le dejó su padre, de la vida que lleva al lado de su hija, María, de 12, y de los proyectos que tiene en puerta:

“Estoy en paz y tranquila, porque le dije cuánto lo amaba y llevo su enseñanza, su legado”.

-¿Cuál es el legado que te deja?
“Mi padre me dejó el estudio, la disciplina, la constancia, el defender lo que tanto trabajo me costó construir; me enseñó a ser justa, a no quedarme callada, a exigir respeto hacia mi nombre y mi carrera, que siempre ha sido honorable. Él fue el ser más generoso y bondadoso que yo pude conocer, nos brindó y compartió no solo su inmenso amor, sino algo de su gran sabiduría”.

“Nunca. Yo audicionaba en los casting como cualquier persona, es una gran forma de educarte, que no te ayuden, que por ti logres estar en tus proyectos y que tus logros sean por ti misma. Nunca tuvo que abrirme camino o ayudarme a entrar a algún lado y se lo agradezco. Es un orgullo ser su hija, porque tuvo fama de gran músico y gran maestro”.

“Sí, mi papá toda la vida se dedicó a la música; y mi mamá bailó puntas (danza afro-indígena), flamenco, y sigue tocando las castañuelas... es nuestro modo de vida, el arte. Soy muy feliz y muy agradecida porque la vida me sigue permitiendo vivir de lo que me gusta”.

“Sí, me acuerdo desde niña escuchar música en mi casa, las vocalizaciones, los alumnos de mi papá; mi mamá pintaba y le encanta coser, veías siempre movimiento en mi casa. Mis padres siempre fueron superamorosos, y me llevo increíble con mis hermanas, siempre hemos sido familia muégano”.

-¿Qué recuerdos tienes de momentos especiales de tu infancia?
“Mis mejores viajes han sido en familia, mi papá y mi mamá nos llevaban a pasar las navidades y el Año Nuevo en Estados Unidos, en Los Ángeles, en Las Vegas; mis mejores recuerdos son con mi familia”.

-¿Tus hermanas también se dedican a la vida artística?
“Soy la hermana de en medio y la única que se dedicó al cien por ciento al quehacer escénico. Mi hermana menor, Denysse, canta espectacular, es directora de la escuela que dejó mi papá (Centro Cultural Willy Gutiérrez). Mi hermana mayor, Elsa María, hizo la película Veneno para las hadas, junto con Ana Patricia Rojo, cuando eran niñas, pero no siguió, estudió Diseño Gráfico”.

“¡Uf, ya son más de cuarenta años de carrera! Inicié a los 6 años en comerciales, y a los 12 hice mi primera comedia musical en el Teatro Insurgentes; mi formación es completamente teatral y ha sido lo mejor”.

“En 1996, Álvaro Dávila me mandó al casting para hacer Nada personal, con (Armando) Manzanero, y tuve la fortuna de quedarme con la canción de la novela, junto con el maestro; a partir de ahí mi vida cambió, pues empezaron a abrirse todas las puertas como actriz y cantante”.

“Él cambió el rumbo de mi carrera; grabamos, viajamos juntos, reímos, conduje con él mucho tiempo, me hizo parte de su familia, como él lo fue de la nuestra. Era un ser humano extraordinario, maravilloso, un ser increíble, y sé que sí era una de sus grandes consentidas”.

“En 1999 estuve en Catalina y Sebastián, producción de Antulio Jiménez Pons, donde hice a la villana; siguieron muchas otras. También hice La niñera y fui jurado de La Academia”.

“¡No!, tengo más de 20 obras, 15 novelas, dos películas, cuatro series, algunos discos; estoy muy contenta, la vida me ha premiado, porque hasta la fecha hago lo que me gusta para no tener que trabajar”.

-Además, ahora te vemos muy activa en Tik Tok...
“Mi hija me presentó el TikTok, y cuando lo descubrí, dije: ‘Qué padre’; aparte, no me tengo que maquillar, me pongo todos los filtros y está increíble; me da la oportunidad de explotar lo que Dios me dio como comediante... la verdad me divertí mucho”.

-De todas tus facetas artísticas, ¿cuál es tu favorita?
“Me considero bailarina de tap, antes que de todo lo demás, pero mi favorita es la comedia musical, porque haces comedia, actúas, cantas y bailas, ahí es donde me gusta estar, pero disfruto mucho hacer otras cosas; por ejemplo, nunca había hecho circo y ahora voy a hacerlo”.

“¡Tres telenovelas al mismo tiempo!: Amor en custodia, que en Azteca la están retransmitiendo; en A que no me dejas, que también están retransmitiendo en el canal TLNovelas; y en Mi fortuna es amarte, que sigo grabando y está al aire en horario estelar en Las Estrellas; estoy muy contenta”.

-A tu hija también la vemos muy activa en la red social, ¿también se va a dedicar a la vida artística?
“María nació cantando, bailando, pero ella es más privilegiada, trae el cuerpazo integrado. Ya estuvo en un par de capítulos para una serie de Amazon y le gusta, entonces ya lo trae, nomás hay que apoyarla, guiarla y alentarla a que estudie y se prepare, que es lo más importante”.

“Soy un sargento muy exigente; puedo ser muy divertida, a veces puedo ser su bruja y a veces su hada, pero me tiene que hacer caso”.

-Y en la vida amorosa, ¿has tenido relaciones muy importantes?
“Sí. Mi primer novio lo tuve a los 18 años; luego, con Demián Bichir fueron siete años y me casé por la Iglesia y por lo civil. Con Mauricio Martínez duré dos años y medio; y luego con Lisardo, con quien también me casé, duré otros siete años. Actualmente con todos mantengo una buena relación”.

“Sí, actualmente me llevo increíble con Demián, con toda la familia Bichir. Con Mau nos seguimos viendo, tenemos el mismo humor y hablamos de lo mismo; es un ser que se va a quedar para siempre en mi familia y en mi corazón. Y Lisardo es el papá de mi hija María, nos llevamos muy bien”.

“En este momento estoy felizmente soltera, muy bien, muy tranquila. No hay galán, no estoy cerrada, pero no ha llegado la pareja que pueda acompañarme en el camino... pero llegará cuando tenga que llegar”, concluyó.