Omar Fierro asegura que ha tenido experiencia del tercer tipo

Omar Fierro, de 58 años, nos reveló que hace más de un año vivió una experiencia única en el llamado Proyecto Torah, un “lugar sagrado” ubicado en algún punto de Guanajuato, que fue creado para tener contacto con seres de otros planetas y conocer más sobre ellos.

-Omar, viviste una experiencia de otro mundo…

“Así es, estuve en el Proyecto Torah, un lugar construido por mi amigo Adolfo para que lleguen los ovnis; ellos le dieron la información de dónde y cómo hacerlo”.

-¿Dónde se ubica el Proyecto Torah?

“Está en la sierra en Guanajuato, no sé exactamente dónde, sólo que está a la mitad de la nada... de San Miguel de Allende se hace como una hora en carro. Ahí hay tres círculos sobre la tierra y 33 piedras”.

-¿Qué se hace en ese lugar?

“Pasas, te paras frente a cada una de las piedras, las sientes y las escuchas; visualizas el mejor momento que hayas tenido y tienes cierta conexión emocional con ellas. En cada piedra vas sintiendo cosas diferentes”.

-¿Tú qué sentiste?

“Con unas piedras sientes amor y en otras como desesperación. Yo sentí muchas cosas en todas sin tomar una gota de alcohol ni estar fumado. Hay quienes tienen un contacto más profundo”.

-¿Qué más hiciste en ese lugar?

“Cuando cayó la noche, vimos gran cantidad de luces que se movían rápido; nos dijeron que eran los extraterrestres que pasaban a saludar, pero yo esperaba que bajaran más para tener contacto con ellos”.

-¿Cómo eran las luces?

“Primero chiquititas y estaban muy arriba, después bajaron y se hacían en forma de ‘Z’; sé que no lo puede hacer un avión, helicóptero, dron o estrella fugaz. Yo no vi ningún alien, sólo luces y cosas anormales en el cielo”.

-¿Con qué sentimiento saliste de ahí?

“En el momento que vi las luces, sentí paz, mucha paz y calma. Ojalá me hubieran pasado más cosas, pero sólo pasó lo que cuento, nada más”.

-¿Cuál es tu opinión de todo eso?

“Yo no creo que seamos los únicos seres vivientes en todo el univers y mucho menos que seamos los más inteligentes; sé que hay algo arriba, muy diferente a nosotros, y estoy seguro de que en la Tierra existió algo antes de los humanos, incluso pienso que esos seres fueron los que ayudaron a que las pirámides que conocemos estén tan perfectamente hechas”.

-¿Ya te llamaba la atención este tema?

“Sí, porque, te repito, no podemos estar solos en el universo, hay miles de seres”.

-¿Recibiste algún mensaje?

“No recibí ningún mensaje, pero sí me conecté sentimentalmente con las piedras y pude sentir todo a través del aire; quiero ver si un día me llevo a mis hijos, pues me encantaría que vivan la experiencia de sentir que hay algo fuera de nosotros, es una experiencia única e inolvidable. Quiero que vayamos y nos quedemos varios días para disfrutar más, espero tener otras sensaciones”

-¿Qué te dijeron cuando les platicaste?

“Que estoy loco, pero cuando los lleve, verán que no... mucha gente con la que he platicado se impresiona y me dice que los invite, pero la verdad es que sólo pueden ir los invitados del creador. Yo no he regresado en más de un año porque ando trabajando, pero en cuanto pueda, volveré. Es una experiencia que quiero repetir una y otra vez”, finalizó.