Para desfilar no bastó el casting, ¡también tenía que beber sólo agua durante 24 hrs!

Para desfilar no bastó el casting, ¡también tenía que beber sólo agua durante 24 hrs!

Ulrikke Hoyer.

Ulrikke Hoyer sufrió humillante momento en desfile.

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Monica Schipper / Getty Images.

Ulrikke Hoyer sufrió humillante momento en desfile.
Monica Schipper / Getty Images.

No importó su experiencia en otras pasarelas.

Ulrikke desfile.
Le dijeron que estaba muy gorda para desfilar.

Ulrikke Hoyer, una joven modelo danesa ha denunciado en Facebook el terrible momento que vivió cuando quiso desfilar para importante marca.
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La modelo ha trabajado para firmas como Louis Vuitton, Valentino, Versace, Hugo Boss, John Galliano, Ele Saab, entre otras, incluso ha protagonizado portadas de revistas como W Magazine y Vogue Paris.
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Sin embargo, su amplia experiencia y belleza no fueron suficientes, pues el pasado 13 de mayo, Ulrikke viajó hasta Japón para participar en el desfile crucero de Luis Vuitton que se llevó a cabo en Kioto, y en el que se topó con tremenda decepción.
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Hoyer mide 1.78 de altura y es talla extra chica, pero a pesar de sus medidas la marca la rechazó porque era demasiado grande, demasiado gorda, y luego de probarse las prendas recibió una llamada de Alexia Cheval, la encargada del casting diciéndole que hubo serios problemas durante las toma de medidas, que tenía la car y estómago hinchados, y que si quería desfilar necesitaba beber sólo agua durante 24 horas.
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La modelo explico que no sabía si reír o llorar, además dice que al final el outfit que se probó ni siquiera desfiló en la pasarela, “Si todo fue simplemente porque cancelaron mi look, ¿por qué tenían que atormentarme?”.

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No puedo aceptar que el comportamiento de esta gente sea ‘normal’. Les resulta placentero ejercer su poder sobre chicas jóvenes y llegan al extremo de forzarte hasta un trastorno alimenticio” afirmó Ulrikke.
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Contó que después del bochornoso momento se fue a cenar con algunas modelos y luego a su habitación, pues no podía enfrentarse a la gente que acababa de humillarla, y 3 horas después estaba en el avión de regreso a casa, “Lo que iba a ser una experiencia única y alucinante acabó como algo muy humillante”.
Ulrikke compartió su historia en su cuenta de Facebook y lamentó que las modelos tengan que verse forzadas a hacer cosas en contra de su salud para poder desfilar.
KP
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