Alejandro Gou por primera vez abre su corazón y nos platica de su camino al éxito

Considerado uno de los productores más importantes de la actualidad, Alejandro Gou Boy por primera vez nos abre su corazón y nos cuenta que inició en el mundo del espectáculo a los 5 años, y de qué manera se dio cuenta de que lo suyo era producir.

Además, que pese a la pandemia cree que vive la mejor época de su vida al lado de su esposa, la bailarina Abril Gálvez, de 41, y sus hijos: Patricio, de 10, y Emilia, de 6:

-Alejandro, tienes una herencia teatral...

“Siempre digo que me hicieron en un teatro. Vengo de un gran artista, mi padre fue el creador de las fotonovelas y era el dueño del Bar Miau, donde se presentaban los artistas más famosos de México”.

-¿Tu padre fue tu maestro?

“Tuve un padre ausente, se casó cinco veces; de hecho, Kitty de Hoyos (q.e.p.d.) fue mi madrastra, sin embargo, sí fue mi maestro de teatro”.

-¿Desde niño te la pasabas en el teatro?

“Así es, pero trabajando. Pasé por todos los puestos: empecé en la taquilla, luego en la dulcería, audio, iluminación, tramoya, hasta fui acomodador; mi papá me enseñó todo sobre el teatro”.

-¿Aprendiste en vivo?

“Sí, aprendí en la escuela de los ma$%&#$%, en la escuela de la vida”.

-¿No te gustó la actuación?

“Hice cientos de fotonovelas; incluso trabajé mucho con Vero Castro, pero mi papá me despidió porque siempre salía con los ojos cerrados y se gastaban muchos rollos, desde ese momento se me negó todo como actor”.

-¿Qué estudiaste?

“Terminé mi preparatoria en el Centro Universitario México. Quería estudiar Comunicación, pero mi padre me preguntó que qué deseaba hacer, le contesté que quería seguir sus pasos y decidió que no estudiara más, para él era una pérdida de tiempo”.

-¿Qué pasó después?

“Le habló a Luis de Llano Macedo y al día siguiente entré a Televisa como asistente de producción del programa Papá soltero, con Manolo García de director (q.e.p.d.)”.

-¿Cuál era tu trabajo?

“Al principio llevaba café, pero de repente faltó el asistente de dirección y me pusieron ahí por cuatro años; luego fui asistente de cámaras con Marco Flavio Cruz durante siete años, y terminé editando... hacía de todo”.

-¿Ahí sí te sentías pleno?

“No; la televisión me encantó, viví experiencias maravillosas y fue una gran escuela para mí, pero lo mío era producir mis obras de teatro”.

-¿A quién le agradeces todo lo aprendido?

“A mucha gente, pero en especial a Marco Flavio Cruz y a Luis de Llano”.

-¿Después te fuiste a hacer teatro?

“Sí, mi padre tenía el Teatro Lomas Verdes. Pinocho fue mi primer obra teatral, la produje hace 31 años junto con Edgar Rico y nuestro socio era Eugenio Derbez. Tuve el privilegio de trabajar con Cachirulo, Ramón Sevilla, Arturo Espinoza, Leopoldo Falcón, que realizaban teatro infantil; de ahí no he parado. Llevo producidas casi 100 obras de teatro”.

-¿Cuál es el género que más has producido?

“Produzco de chile, mole y manteca; dirigí muchos años mis obras infantiles como Barney; Dora, la exploradora; Lazy town, Spiderman, y después tuve que poner a un extraordinario director, Armando Reyes, para enfocarme en otros proyectos, pero me encantaban los infantiles”.

-¿Qué ha sido lo más complicado que has hecho?

“Hace 20 años nos arriesgamos a hacer comedia como: A oscuras me da risa, La señora presidenta, entre otras; luego hice shows para adultos y tuve el Mascabrothers Show Center, donde estuvimos siete años con gran éxito. Realicé conciertos como Los Grandes del Rock, y espectáculos internacionales como Blue man group. Tengo tres teatros: el Aldama, Centro Cultural Telmex 1 y 2; y lo más complicado es hacer teatro de gran formato, las cuales se han convertido en mis consentidas: Hoy no me puedo levantar, Jesucristo Súper Estrella, ahora estoy trabajando con la puesta José, el soñador, y les prometo que será inolvidable”.

-¿Cuál obra es un parteaguas en tu carrera?

“Sin lugar a dudas, Hoy no me puedo levantar, en los musicales; pero la obra que me llevó a los cuernos de la luna fue El Tenorio cómico, es la obra más taquillera en mi vida. Me emociona hacer teatro, lo amo”.

-También eres un creador de estrellas...

“Me siento afortunado de que las producciones Gou sean una plataforma, me considero un semillero de talento; por ejemplo, Carlos Rivera hizo sus pininos en el Mascabrother Show Center y mira dónde está ahora. María León hizo el casting para Hoy no me puedo levantar, le ofrecí el protagónico y no sabía quién era”.

-¿Has encontrado amigos del medio?

“Con todos me llevo bien, pero hay gente como Daniel Bisogno, Ariel Miramontes ‘Albertano’, El Negro Araiza y los Mascabrothers, que se han convertido en grandes amigos”.

-¿Cuál ha sido tu éxito para no terminar en pleito con los artistas?

“Hablar de frente, me manejo con mucho profesionalismo y mi lema es: ‘No expliques con manzanas, lo que tienes que decir con hu$%&#’".

-¿Cómo has enfrentado la pandemia?

“Con muchos hu$%&#, porque han sido tiempos muy complicados. Los teatros han estado cerrados por ocho meses, pero no pierdo la esperanza y la fe, sé que vamos a regresar”.

-¿Eres un productor con suerte?

“Sí, pero lucho por mis objetivos y no quito el dedo del renglón”.

-Hablando de familia, siempre te vemos acompañado de tu esposa y tus hijos...

“Sí, me fascina, soy un hombre pleno y feliz de que mi familia esté en esta aventura conmigo, hablar con ellos a diario de teatro es maravilloso”.

-Ellos también actúan...

“Claro, estuvieron en Billy Elliot, en Jesucristo Súper Estrella, y ahora se preparan para José, el soñador, con clases de canto, baile y actuación, y no los obligo a nada, es algo que traen en las venas”.

-Tu esposa, ¿cómo te apoya en tu trabajo?

“Al cien por ciento; como bailarina profesional, se involucra en todos los proyectos”.

-¿Cómo se conocieron?

“Ella audicionó para un proyecto que se llamaba Ensalada de locos, ahí la conocí; y llevamos 12 años de casados con dos maravillosos hijos: Patricio, de 10, y Emilia, de 6".

-Además has tenido un cambio físico...

“Desde que empezó la pandemia comencé a hacer ejercicio y tengo un primo nutriólogo que se llama Miguel Ángel Gou; hice una dieta cetogénica y ya bajé 21 kilos. Me siento en mi mejor momento, tengo una gran familia, salud, un gran equipo, no puedo pedir más; le doy gracias a Dios por lo que estoy viviendo”, finalizó.