Diana Golden narra cómo fue el velorio de Raquel Pankowsky

El pasado 28 de marzo y de manera sorpresiva, la actriz Raquel Pankowsky perdió la vida por complicaciones pulmonares, dejando un gran vació en el mundo del espectáculo.

Durante el último adiós a la actriz estuvieron presentes varias personalidades del espectáculo entre ellas Diana Golden, quien al compartir la misma religión que Pankowsky, la judía, fue la encargada de realizar los rezos y despedirla.

Dos semanas después de su partida, Diana nos compartió algunos detalles de lo que sucedió en el funeral, ya que no se permitió la entrada a ningún medio de comunicación; pero lo que sí se sabe es que fue enterrada en el panteón israelí, como lo dictan las normas de su comunidad.

“Se le complicaron los pulmones, la neumonía, quién sabe, pero eso fue lo que me dijo su hermano, y bueno, ya cuando nos toca... Pero yo estaba muy afectada y me siento con serenidad por haber ido a decir su ‘Kadish’ de duelo, también le canté y recé el Salmo 91 estaba primero con Sugey Ábrego y luego con Shalom García y Roberta de América, luego Paty Reyes Spíndola. Yo fui al día siguiente de su fallecimiento que no había prensa ni nada”

“No, el lunes llevaron el cuerpo alrededor de las 9 de la noche y el martes se lo llevaron a las 3 de la tarde. No podía esperar, no pueden traer un cuerpo de un lado para otro”.

“De acuerdo a nuestras costumbres, yo no podía dejar de ir a decir el Kadish de duelo. Me armé de tripas corazón, llegué y lo hice. Leí varias veces el Salmo 91”.

“Sí, quedé exhausta pero con serenidad. Aunque al final solamente toqué una vez el ataúd y le dije: ¡hasta pronto amiga! Hay muchos rezos en nuestra religión cuando alguien se muere, pero los más importantes son el Kadish de duelo y el Salmo 91”.

“Uy, hace muchos años, trabajando, pero de siempre nos llevamos bien. Hablando con Paty Reyes le dije: ‘Paty pero si el viernes nos dijimos el shabat shalom las dos”

-¿Ella estaba hospitalizada desde hace tiempo?

“Eso sabes que nunca me lo dijo la canija, su hermano Jaime me dijo que no quería que nadie supiera, que nadie la viera y Jaime mantuvo la tradición, el ataúd cerrado. Yo le dije: Jaime: ¿no has abierto ese ataúd, verdad? Y me dijo: ‘No, no, no. No se puede’”

-¿Estuvo en el hospital de la ANDA?

“La parte del hospital no la sé porque lo mantuvo muy cerrado, ni siquiera sabía que estaba internada. Siempre estuvimos en contacto porque la quería mucho, era muy divertida. Me costó mucho trabajo levantarme para ir al velorio, que en nuestra religión no se llama velorio porque nosotros no ponemos velas, no ponemos flores, no ponemos nada”.

“No se llama nada, se llama rezo. Vas al panteón directo, ahí van todos, no se vela en ningún lugar”.

“Como Jaime tiene muchos amigos y tiene más amigos afuera que adentro de la comunidad, por consideración a todos la dejó un día ahí para que se fueran a despedir ,pero a las 3 se la llevaron al panteón israelí para hacer las cosas como se debe de hacer”.

“Sí, no se deja un cadáver dos días, lo llevan al panteón israelita y ahí lo preparan. Se deja el cadáver varios días sólo en casos especiales como fue el de mi padre porque mis hermanos vivían en otros países y no alcanzaban a llegar”.

“Los dolientes tienen una ceremonia con el rabino. Se ponen la ropa que va a ser rasgada y se canta todo el salmo 91 de David que es para despedir a las almas, se dice el kadish de duelo. Yo en la funeraria leí el kadish en español porque nadie hablaba hebreo. Su hermano me dejó hacer el rezo.Todos lo leyeron por el celular. Yo le dije a Raquel: ‘Yo sé que a ti te chocaba rezar pero aquí te amolaste, te voy a rezar’.

“Los ataúdes nunca se abren, el de Raquel estaba muy elegante, normalmente es un cajón de madera, lo más simple, y arriba va una manta con la estrella de David. Los entierros judíos son los más austeros. Se pone en la caja y directamente al cementerio”

-¿Y luego que pasa?

“Se reza el salmo 91 varias veces hasta que se llega al lugar del entierro. Luego el rabino sigue rezando. Sólo los de la comunidad pueden echar la tierra, se baja el ataúd . Antes, cada persona de la familia toma un puñado de tierra y lo echa en el ataúd y luego las personas de la comunidad tapan el agujero ya con el ataúd. Se queda así, tal cual. Luego hay un lugar con piedritas, y cada quien toma una, manda un deseo y la pone en la tumba. A los 11 meses que se asienta se pone la lápida. Durante esos 11 meses no hay cruz , ni una estrella de David, nada”.

“No. La familia se reúne en una pequeña habitación dentro del panteón y se comen un huevo cocido con ceniza que significa que se cierra el círculo de la vida. Luego vienen el Shivah que son 7 días de duelo estricto. La familia se queda con la misma ropa durante siete días, rasgada, sin bañarse, porque es un duelo. Los hombres se afeitan, las mujeres no se peinan. Total austeridad . Esperan la visita de los amigos y familiares de la comunidad a la casa. Los que van ,llevan por lo general comida ,nunca flores. Se reza en la mañana en casa y en la noche en la sinagoga”.

“A la semana, los dolientes se quitan la ropa rasgada , la queman y plantan un árbol o flor. Durante todo el año rezan el Kadish del duelo.El panteón solo puede ser visitado por la familia porque son sitios sagrados”, finalizó.