Elizabeth Dupeyrón asegura que los medicamentos le causaron enfermedad

Hace 5 años, Elizabet Dupeyrón, lamentablemente perdió a su hijo Ramsés Alí Márquez Dupeyrón, quien falleció a los 39 años de edad, tras tomar ayahuasca en un retiro espiritual.

En su momento, las autoridades detallaron que el deceso fue por falta de atención médica oportuna, pero la actriz ha sido firme en asegurar que esto ocurrió porque fue ‘envenenado’, y que la sustancia que ingirió le causó severos efectos secundarios en su organismo.

Elizabeth Dupeyrón asegura que muerte de su hijo no se ha resuelto porque hija de Colosio está involucrada

Desde entonces, la actriz ha intentado que los culpables paguen por lo sucedido sin ningún éxito, pero esta tarde, en entrevista con ‘Ventaneando’, dio a conocer que es muy posible que pronto logre su cometido: “Un despacho de abogados me buscó para ayudarme a reabrir el caso de mi hijo y buscar justicia, que paguen los que lo envenenaron y que no quisieron atender”.

Elizabeth Dupeyrón Ventaneando Hijo Tristeza Antidepresivos Parkinson — Instagram | A 5 años del fallecimiento de su hijo, la actiz continúa buscando que se haga justicia.

Además contó que todo este proceso ha deterioraro su salud, pues el dolor de perder a su primogénito ha sido realmente fuerte: “Estoy muy molesta por la impartición de justicia en nuestro país, yo siempre he tenido una herida, y no se va a cerrar jamás. He tenido consecuencias muy graves a mi salud”.

Aseguró que el medicamento que tomó para evadir su pena fueron los que le provocaron una enfermedad aún más grave: “Esas medicinas que según se toman para la depresión, para dormir, te llevan al caos y a la desesperación. Siento que mi parkinson fue culpa de los medicamentos, fue inducido porque yo estaba muy sensible por lo de mi hijo”.

“Un golpe como el que recibí, que no es fácil perder a un hijo pues te rompe el sistema nervioso, y cuando intenté arregarlo me fue peor”, aseveró.

Y también culpa a un procedimiento quirúrgico: “Me hicieron una operación de 10 horas, me pusieron un estimulador para drme el control, que ni tengo controlado, y todo eso también me afectó. Yo gozaba de salud, de energía, alegría, de todo eso, y de pronto se me complicó y me dejaron sin nada”.

“Ahora tengo que buscar y recoger migajas de lo que tenía en abundancia. Ahora estoy sin trabajo, pero no quiero ni puedo hacerlo. Me estoy enfrentando, no quiero ser cobarde ni tampoco quiero decir que estoy mejor de lo que estoy”, finalizó.