Fallece Wanda Seux, una leyenda que poco a poco se fue apagando

Nacida en Paraguay el 3 de enero de 1948, Juana Amanda Seux Ramírez, a quien conocimos artísticamente Wanda Seux fue una bailarina y actriz que logró grandes cosas en el medio artistico.

Aunque su meta no era pertenecer al medio artístico, Wanda a los 18 años y recién egresada como profesora de inglés, se trasladó a Buenos Aires por mejores oportunidades, y es así que entrá como bailarina de danza árabes en un restaurante. En 1972, por recomendación de un novio fue que su nombre se convierte en “Wanda Seux”.

Un año después, es descubierta por el actor y productor Eber Lobato, quien en aquellos años estaba casado con la vedette Nélida Lobato, y es llevada a participar donde desde los primeros show se dio a notar por su belleza y su forma de bailar. Gracias a esto, viajó a Venezuela para ser la estrella del hotel Tamanco, donde ahí, la vió Hugo López, quien era promoter de estrellar de la talla de Julio Iglesias y Raphael, quien la invitá a México para que realice una gira.

Fue en 1976 cuando llegó a nuestro país ya con un nombre a nivel internacional, pues fue uno de los show más vistosos, sus vestuarios se los mandaban desde Argentina los mejores modistos y gracias a todo esto, se le empezó a conocer como “La Bomba de Oro” o la “barbie” de las vedettes. Lugares como “El Capri”, “Follies Berguere” y el salón “Marrakesch” le abieron las puertas y tuvieron muchas noches de éxito en aquellla ciudad de méxico que se vivía tanto de día como de noche, donde se dice, se hizo de una gran fortuno que con los años la fue perdiendo.

Gracias a su belleza, debuta en el cine en 1978 en el filme “El arracadas” a lado del gran Vicente Fernandez y a partir de esa fecha, se convirtió en las consentidas del famoso cine de las ficheras, compartiendo proyectos con personalidades como Sasha Montenegro, Andrés García, María Victoria y todos los comediantes de aquella época.

Pero no todo en la vida fue éxito y riqueza, ella misma compartió varias veces los tragos tan amargos que tuvo que pasar para llegar hasta donde llegó, abuso sexual, un matrimonio fallido con un hombre que le llevaba 37 años de diferencia, el no ser madre fue un duro golpe también para ella y aunque adoptó a una hija, el papel de madre lo vivió a distancia y sobre todo, en los últimos años, el cáncer de mamá y los derrames cerebrales que le atacó la fueron apagando lentamente. Su único pendiente, sus más de 20 perros que tenía viviendo con ella, pues como fiel amante de los animales, los procuró y los alimento hasta el último momento.

En los últimos años trabajo en la televisión en proyectos como “Alcanzar una estrella”, “Los sicarios”, “Atrévete a soñar” y “Hasta que el dinero nos separe”. En el 2016 la regresó al ojo público gracias al documental títulado “Bellas de noche”, donde en sus propias palabras y a lado de sus grandes amigas vedettes como Rosy Mendoza y Olga Breeskin, por mencionar algunas, narran la gloria y el infierno que vivieron en sus mejores años de vedettes.

En el 2018 le vino el primer derrame cerebral, el cual sobrellevo de la mejor manera y por recomendación médica se vio obligada a radicar un tiempo en Acapulco, para que el clima y el nivel del mar le ayudara, un año después, otro derrame cerebral la ataca lo cual ahora este no logró superar del todo.

Hasta siempre Wanda, hasta siempre querida vedette, ahora, tus bailes y tu encanto brillará en el cielo, a lado de tu madre, a quien, en tus propias palabras “el día que llegué al cielo se que mi madre me recibirá con los brazos abiertos”.