Jorge Garralda cumplirá 32 años en televisión, recuerda sus inicios
El conductor reveló que le gustaría incursionar en programas de concursos.
Con más de 40 años de trayectoria, Jorge Garralda, de 61, es toda una institución de la comunicación en México y con su programa A quien corresponda, que está por cumplir 32 años al aire, primero por Imevisión y luego TV Azteca; y la creación de campañas como el Juguetón, Vive sin Drogas y Movimiento Azteca, se ha abanderado como defensor de las causas sociales. Platicamos con él y nos contó cómo ha sido este camino:
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-Jorge, ¿en dónde y cuándo naciste?
“Nací en la Ciudad de México, pero como hago televisión para todo mundo, digo que soy de todo México”.
“Nací en la Ciudad de México, pero como hago televisión para todo mundo, digo que soy de todo México”.
-¿Cómo fue tu infancia?
“Por ahí dicen que tuve una niñez tan triste, que por eso diseñé el Juguetón... pero no, mi infancia fue padrísima, muy normal”.
-¿Te llegaban los Reyes Magos?
“Sí, a casa llegaba Santa Claus, que era el de los juguetes, y los Reyes Magos, que traían ropa; eran muy generosos”.
“Sí, a casa llegaba Santa Claus, que era el de los juguetes, y los Reyes Magos, que traían ropa; eran muy generosos”.
-¿Desde niño querías estar en los medios de comunicación?
“Creo que sí me surgió ese enamoramiento desde niño. Fue por un amigo de mis papás, don Jorge de Valdés, el papá de Toño de Valdés; ese señor es una de las grandes voces de México y por él recorrí la magia de la televisión desde chiquito, cuando me llevaron a Televicentro a ver El premio de los 64 mil pesos. Fue maravilloso, babeé al ver ese mundo”.
-¿Cómo fue tu vida familiar?
“Vengo de una familia bien acomodada, pero se desacomodó cuando mis papás decidieron que ya no funcionaban; después de que ambos siempre trabajaron, regresaron a la vida juntos en su retiro y descubrieron que ya no se conocían”.
“Vengo de una familia bien acomodada, pero se desacomodó cuando mis papás decidieron que ya no funcionaban; después de que ambos siempre trabajaron, regresaron a la vida juntos en su retiro y descubrieron que ya no se conocían”.
-¿Eso te afectó?
“Para entonces, yo ya no estaba como para traumas infantiles y me fui a vivir solo”.
-¿Y cómo comenzó tu carrera en los medios?
“De chavo empecé a hacer mis pruebas en San Miguel de Allende, Guanajuato; luego busqué espacios en Radio Centro, Radio Mil, y me pasaron el tip de que en Radio Fórmula había chamba, ahí cubrí espectáculos mucho tiempo, a inicios de los 80”.
“De chavo empecé a hacer mis pruebas en San Miguel de Allende, Guanajuato; luego busqué espacios en Radio Centro, Radio Mil, y me pasaron el tip de que en Radio Fórmula había chamba, ahí cubrí espectáculos mucho tiempo, a inicios de los 80”.
-¿Qué vino después?
“Cubrí nota roja, no me gustó, pero como diría mi madre, que en paz descanse, desde entonces armaba pancho para las injusticias”.
“Cubrí nota roja, no me gustó, pero como diría mi madre, que en paz descanse, desde entonces armaba pancho para las injusticias”.
-Entonces, ¿cómo llegaste a la televisión?
“En 1987 empecé en un noticiario en Imevisión, una televisora del gobierno, y luego me volví la voz de toda la televisora”.
“En 1987 empecé en un noticiario en Imevisión, una televisora del gobierno, y luego me volví la voz de toda la televisora”.
-¿Cuándo comienza A quién corresponda?
“En 1990 hicimos este programa y muchos nos preguntaban si el gobierno nos decía en dónde no golpearlo, y yo respondía que no, que lo sacábamos muy a gusto”.
“En 1990 hicimos este programa y muchos nos preguntaban si el gobierno nos decía en dónde no golpearlo, y yo respondía que no, que lo sacábamos muy a gusto”.
-Desde entonces, sigues al aire...
“Voy por 32 años con el programa, que estaba destinado a no existir porque nació en gobierno, a no existir en la iniciativa privada, porque luego Ricardo Salinas compró Televisión Azteca”.
“Voy por 32 años con el programa, que estaba destinado a no existir porque nació en gobierno, a no existir en la iniciativa privada, porque luego Ricardo Salinas compró Televisión Azteca”.
-¿Qué pasó en ese entonces?
“Yo no conocía a este señor y no sabía qué iba a pasar siendo iniciativa privada; yo me iba a ir, porque además me liquidaron del sindicato, pero al final negocié con Ricardo e hice un trato con él”.
“Yo no conocía a este señor y no sabía qué iba a pasar siendo iniciativa privada; yo me iba a ir, porque además me liquidaron del sindicato, pero al final negocié con Ricardo e hice un trato con él”.
-¿Cuál fue?
“Me dijo: ‘Yo no puedo mantener a todo México’, y yo: ‘No, pero sí puedes pagarles a los reporteros, editores, equipo’, y me respondió: ‘Sí, pero no me puede costar, porque no hay capital que aguante esto’”.
-Entonces, ¿cómo se ha sostenido?
“No cuesta, lo hacemos mexicanos con mexicanos, y así el programa ha seguido saliendo, aunque hay quienes nos critican por criticar”.
“No cuesta, lo hacemos mexicanos con mexicanos, y así el programa ha seguido saliendo, aunque hay quienes nos critican por criticar”.
-¿Cómo te has ganado la credibilidad?
“Voy a decir la neta, esto radica en que le creo a la gente, aunque no crean que vienen puros inocentes a verme, pero como no soy juez, les tengo que creer; y si digo algo mal al aire, lo admito y lo corrijo. Además, si la gente me dona algo, lo pueden ver en las notas que hacemos, que son el acuse de recibo”.
“Voy a decir la neta, esto radica en que le creo a la gente, aunque no crean que vienen puros inocentes a verme, pero como no soy juez, les tengo que creer; y si digo algo mal al aire, lo admito y lo corrijo. Además, si la gente me dona algo, lo pueden ver en las notas que hacemos, que son el acuse de recibo”.
-¿Qué nos puedes decir del Juguetón?
“Tengo la campaña más grande de colecta y distribución de juguetes en el mundo, nadie lo ha hecho, eso me da una exclusiva”.
“Tengo la campaña más grande de colecta y distribución de juguetes en el mundo, nadie lo ha hecho, eso me da una exclusiva”.
-Pero también hay detractores...
“Desde que las redes sociales crecieron, estoy acostumbrado a la difamación en enero; dicen: ‘No es cierto que llegan a todo México’, y es que necesito un responsable en cada población y no tengo tantos reporteros”.
“Desde que las redes sociales crecieron, estoy acostumbrado a la difamación en enero; dicen: ‘No es cierto que llegan a todo México’, y es que necesito un responsable en cada población y no tengo tantos reporteros”.
-¿Cómo saben a dónde irán?
“Tengo un equipo que hace un censo y así confirman que existe esa población; también hay un consejo de Juguetón para aprobar a dónde necesitamos enviar los juguetes. Debes tener muchos candados”.
“Tengo un equipo que hace un censo y así confirman que existe esa población; también hay un consejo de Juguetón para aprobar a dónde necesitamos enviar los juguetes. Debes tener muchos candados”.
-¿Te falta hacer algo en tu carrera?
“Cuando acabe con la obra social, quisiera hacer un programa de concursos, pero ¿cuándo va a ser eso?, bueno, para el México que conozco, los políticos que tenemos, los abusos que existen, creo que nunca lo haré”.
“Cuando acabe con la obra social, quisiera hacer un programa de concursos, pero ¿cuándo va a ser eso?, bueno, para el México que conozco, los políticos que tenemos, los abusos que existen, creo que nunca lo haré”.
-En lo personal, ¿cómo es Jorge Garralda, el papá, el esposo, el hijo?
“Existe una vida privada, como su nombre lo dice, y nunca he permitido mezclarla; solo puedo decir que como pego de gritos en el trabajo y mando a la porra, mi familia también me ve pegando de gritos y mandando a la porra. En realidad llevo una vida normal, me gusta viajar, curiosear”.
“Existe una vida privada, como su nombre lo dice, y nunca he permitido mezclarla; solo puedo decir que como pego de gritos en el trabajo y mando a la porra, mi familia también me ve pegando de gritos y mandando a la porra. En realidad llevo una vida normal, me gusta viajar, curiosear”.
-¿Qué guardas hasta ahorita como experiencia, con toda esta trayectoria?
“Me ha ido muy bien con todo lo que he hecho y hoy me siento muy a gusto con lo que estoy haciendo, ayudando; y me encanta saludar a la gente en la calle, es una cosa bonita, porque me ven y dicen: ‘Gracias’”, concluyó.