Enrique Guzmán sin dinero ni ganas de vivir tras acusaciones de Frida Sofía

Por otra parte, un trabajador de don Enrique Guzmán, de 78 años, nos contó que a raíz de los señalamientos de abuso que hizo en su contra su nieta Frida Sofía, de 29, en abril pasado, el cantante no la está pasando nada bien. A palabras de esta persona, quien nos pidió mantenerse en el anonimato, don Enrique está muy angustiado, ya que la demanda que interpuso para limpiar su nombre no avanza; además ha perdido oportunidades de trabajo y vive un terrible linchamiento social porque la gente lo señala de abusador. Esto fue lo que nos dijo:

“Nosotros lo vemos muy mal. Aunque en público quiere dar una imagen de que todo está en orden, la verdad es que está muy deprimido porque este escándalo lo ha afectado en lo emocional, en su salud y en
su economía”.

-Dinos, ¿qué ha pasado con la demanda que interpuso en contra de su nieta por difamación?
“El proceso va lento y eso lo tiene muy desesperado porque no se puede resolver la situación. Otra cosa que lo tiene mal es que la gente no ha dejado de atacarlo, le escribe cosas feas en redes y hasta en persona le han hecho groserías. Al principio le enojaba, pero ahora le entristece que lo juzguen por algo que asegura que no cometió y, sobre todo, le angustia que por esa situación ya no le dan trabajo y no puede solventar sus gastos”.

-En junio se presentó vía streaming, ¿cómo le fue?
“Mal, porque la venta de boletos estuvo muy floja, ahí se dio cuenta de que los señalamientos de su nieta sí le dieron en toda la torre; tuvo que pagarles a sus músicos y se quedó sin nada. El show lo produjo su amigo Alejandro Gou, pero ni siquiera él recuperó su inversión. Él es el único que le sigue dando trabajo; incluso en octubre regresará al musical Jesucristo Súper Estrella, que también produce Alejandro, pero de ahí en fuera no ha encontrado algo que le genere ingresos”.

“Él padece diabetes desde hace muchos años y aunque la tenía controlada, a raíz de esto se volvió a poner mal, se le sube o baja el azúcar; además su presión arterial se desestabilizó y sus ganas de vivir han mermado”.

“Porque él mismo ha dicho que mejor ya se quiere morir, lo cual tiene muy preocupada a toda su familia, tanto, que su mujer, doña Rosalba Welter, y sus hijos, le han propuesto ir a terapia psicológica para que lo ayuden”.

“No, pues piensa que lo puede manejar solo, pero en privado lo invade el temor y la melancolía; tiene mucho miedo de que todo salga mal y llegue a pisar la cárcel, dice que no lo soportaría”.

“Por todo lo que se ha visto últimamente con algunas personas públicas que de la noche a la mañana ya pararon en un reclusorio, eso es lo que a él le aterra”.

“Que esté tranquilo, que eso no va a pasar; incluso me parece que tiene un amparo para no ir a la cárcel, mientras se desahogan las pruebas, pero eso no quita que él siga con la angustia”.

“Nunca le ha gustado pedirle nada a sus hijos, y aunque Alejandra le ha propuesto ayudarle con los gastos de abogados, ella también tiene sus propios gastos de salud”.

-¿Sabes si él ha tratado de comunicarse con Frida?
“No sé, pero está decepcionado de ella”, finalizó.