José Eduardo Derbez reveló uno de los incidentes más preocupantes que vivió hace algunos años, cuando una de sus exnovias intentó secuestrarlo debido a que le puso fin a su relación porque se había vuelto demasiado tóxica.
El actor y conductor relató que la chica no se tomó nada bien la noticia y lo llamó por teléfono para intentar retomar su relación, por lo que él accedió al encuentro: "Hasta bajé con mis dos serpientes porque las estaba acariciando... Luego me dice: 'Súbete al coche', agarro, me subo. Era un coche viejo, viejo, de esos largotes, asientos grandotes; entonces me siento y se arranca", comenzó a contar.
"Me acuerdo que agarra y no sé cómo llega a Periférico y me dice: 'Te voy a llevar a una cabaña en el Ajusco y ahí te voy a tener solo para mí'; de novela y le dije: 'No, mi hija, no mam*', entonces no podía abrir ni bajar el vidrio ni nada, no sé si ella le puso algo", agregó y explicó que ni siquiera le dio la oportunidad de avisarle a alguien que estaría con ella.
El hijo de Victoria Ruffo estaba tan impactado por lo que estaba sucediendo, que le pidió que lo bajara en medio del camino: "No se paraba y yo dije: 'No puede ser', me dice: 'Voy a llegar y te voy a amarrar en una cabaña que tengo en el Ajusco y de ahí no vas a salir'. Yo decía no manches, esta si lo va o no a cumplir. Rarísimo, a parte como sí estaba bien enfermita, bien dañada, toxicota, toxicota. Entonces agarré su télefono y le dije: 'Lo voy aventar, ya frenate, ya no me regreses a mi casa'; mi bronca ya no era que me regresara a mi casa, era bajarme donde me dejara".
En su intento de escapar, José Eduardo le dijo que sus serpientes la atacarían: "Me acuerdo que le decía: 'Te van a morder', como si fueran perros, 'Te van atacar'... Agarré su celular y le dije: 'Lo voy a tirar', y me dice: 'Aviéntalo'; a parte cada vez iba manejando más rápido", recordó.
Al notar que sus suplicas no eran suficientes, la engañó diciéndole que volvería con ella si lo llevaba a su casa: "Entonces yo empecé: 'Mira chiquita vamos a platicar, yo te amo', me dijo: 'Me cortaste', le dije: 'Por pend*, pero somos uno mismo, cuál es la bronca'. Seguía manejando muy muy rápido y pensé: 'Si la jalo, los dos nos vamos a ir embarrados, aquí no me funciona hacerle nada a la que va manejando', entonces le empecé a acariciar el cabello, le empecé a dar besitos...".
Finalmente, lo dejó bajar del auto y la amenazó con ponerle una demanda para que no se le volviera a acercar: "Me bajo, le azoto la puerta y le dije: 'No te quiero volver a ver en mi vida, desgraciada, me vas a matar de un susto, donde regreses te voy a demandar', empezó a gritar como loca y sale el portero de mi edificio, entonces se arranca, pero veo que mis amigos están en la calle y le empiezo a gritar: 'Muévanse que esta mujer está loca'; les aventó el coche, pero alcanzaron a brincar y se salió la vieja. Nunca más volví a saber de ella", concluyó.
El hijo de Victoria Ruffo estaba tan impactado por lo que estaba sucediendo, que le pidió que lo bajara en medio del camino: "No se paraba y yo dije: 'No puede ser', me dice: 'Voy a llegar y te voy a amarrar en una cabaña que tengo en el Ajusco y de ahí no vas a salir'. Yo decía no manches, esta si lo va o no a cumplir. Rarísimo, a parte como sí estaba bien enfermita, bien dañada, toxicota, toxicota. Entonces agarré su télefono y le dije: 'Lo voy aventar, ya frenate, ya no me regreses a mi casa'; mi bronca ya no era que me regresara a mi casa, era bajarme donde me dejara".
Al notar que sus suplicas no eran suficientes, la engañó diciéndole que volvería con ella si lo llevaba a su casa: "Entonces yo empecé: 'Mira chiquita vamos a platicar, yo te amo', me dijo: 'Me cortaste', le dije: 'Por pend*, pero somos uno mismo, cuál es la bronca'. Seguía manejando muy muy rápido y pensé: 'Si la jalo, los dos nos vamos a ir embarrados, aquí no me funciona hacerle nada a la que va manejando', entonces le empecé a acariciar el cabello, le empecé a dar besitos...".