Tony Balardi confesó que fumó por primera vez a los 8 años
El comediante reveló que incluso a esa edad se metió a trabajar para comprarse sus propios cigarros.
Redes sociales | El comediante era tan solo un niño cuando probó el cigarro.
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El comediante Tony Balardi estuvo como invitado al programa El minuto que cambió mi destino, donde habló sobre su carrera artística, su vida amorosa y compartió algunos detalles sobre su infancia.
Entre sus confesiones, Balardi recordó la primera vez que probó el cigarro y es que tenía apenas 8 años cuando decidió que era una buena edad para comenzar a fumar.
Tony reveló que siendo un niño se animó a encender su primer cigarro, sin embargo fue descubierto por su madre quien le metió tremenda regañiza: “Yo empecé a los 8 años, mi mamá me encontró con un cigarro, me dio un chanclazo y cuando desperté me estaba regañando”, dijo.
El ex participante de Masterchef aseguró que las palabras de su madre lejos de alejarlo de este mal hábito lo incentivaron, pues a su corta edad decidió buscar trabajo para poder seguir fumando: “Mi mamá me dijo: ‘cuando tengas tu dinero fumas’, Al día siguiente me fui a conseguir trabajo y regresé a mi casa, en la noche con mi cajetilla de cigarros, mi caja de cerillos, una bolsa de pan y cinco pesos. Le di el pan, el gasto y me fui a fumar”, agregó.
En ese entonces creyó que como ya ganaba su propio dinero y hasta daba gasto en su casa, ya tenía derecho de hacer lo que los grandes hacían, pero su madre lo hizo entrar en razón: “Mi mamá fue detrás de mi y me dijo, no mijito, cuando crezcas puedes fumar, ahora no”. Sin embargo, esa fue la primera y única vez que probó el tabaco pues en si juventud no le quedaron ganas de continuar con este mal hábito.
En otros temas, reconoció que tuvo la oportunidad de probar varias cosas; pero afortunadamente jamás se vio envuelto en ninguna adicción: “No soy un santo, pero afortunadamente tuve la orientación de mi mamá... alguna vez la probé, pero dije: no soy de ahí”. Incluso admitió que en un viaje a Cancún se animó a probar la llamada ‘piedra’ y aunque sí le gustó, jamás volvió a consumirla: “Fue una maravillosa experiencia, pero dije: no soy de ahí. Ahí es cuando debes controlar tu vida y debes saber decidir que quieres para ti”, finalizó.
